La accidentada historia de la hermandad
de los Santos Niños de Alcalá de Henares



Medalla de la Hermandad de los Santos Niños (1924-1970)



Hace unos días, cuando el presidente de la recién creada asociación diocesana de los santos Justo y Pastor me invitó a intervenir en la presentación oficial de la misma, por un lado sentí satisfacción y agradecimiento, pero por otro sentí también temor ya que, pese a todo lo que he indagado sobre el culto a los mártires complutenses, era prácticamente nada lo que sabía sobre el tema propuesto para mi intervención, la historia de las cofradías o hermandades que, a lo largo de los siglos, se habían responsabilizado de su culto en Alcalá.

He de alegar en mi disculpa que yo no soy el único responsable de esta falta de información, debida a lo poco que se ha investigado sobre las cofradías complutenses a lo largo de la historia, con tan sólo unos pocos trabajos publicados de desigual interés. Finalmente, picoteando por aquí y por allá y apoyándome principalmente en dos encuestas realizadas en 1770 y 1902, ambas publicadas por Manuel Vicente Sánchez Moltó, conseguí salir relativamente bien librado del brete -mis notas apenas abarcaban medio folio- aunque con el desagradable regusto de no haber podido ser más preciso. Es de desear que en un futuro podamos disponer de un mayor conocimiento no sólo de la hermandad de los Santos Niños, sino de las otras muchas cofradías y hermandades que han existido, o continúan existiendo hoy, en nuestra ciudad.

Y como mi intervención fue, por su propia naturaleza, efímera, he estimado conveniente dejarla por escrito aun a sabiendas de los importantes huecos que no me ha sido posible completar.

Hecha esta aclaración previa, paso a decir que la primera referencia que he encontrado sobre una hermandad consagrada a los santos Justo y Pastor data de una fecha tan tardía como 1770, correspondiente a la encuesta realizada en ese año. A mí me resulta muy difícil creer que ésta no existiera con anterioridad, quizá desde la reversión de las reliquias en 1568, pero aunque es algo que doy por muy probable no he conseguido encontrar documentación alguna al respecto. Lamentablemente la citada encuesta no da ningún dato acerca de las cofradías, limitándose a enumerarlas.

La hermandad de los Santos Niños, que cabe suponer estuviera asentada en la Iglesia Magistral donde se custodiaban tanto las imágenes como las reliquias de los hermanos mártires, desapareció en algún momento indeterminado del siglo XIX sin que haya sido posible saber cuando. Cabe dentro de lo posible que fuera a raíz de la Guerra de la Independencia (1808-1814), la cual supuso entre otras muchas calamidades la desarticulación de la práctica totalidad de las cofradías de la ciudad, varias de las cuales tardarían bastantes años, incluso décadas, en rehacerse, extinguiéndose otras de forma definitiva. Hubo posteriormente varios momentos poco propicios para las cofradías como fueron el Trienio liberal (1820-1823) o las desamortizaciones de Mendizábal (1836) y Madoz (1855), pero dado que éstas afectaron más a las congregaciones religiosas que al clero secular, en este caso concreto las considero menos probables.

En cualquier caso carecemos de cualquier dato relativo a la hermandad de los Santos Niños hasta que ésta fue reconstituida el 20 de agosto de 1865, sin que sepamos nada de lo que pudiera haber ocurrido en el medio siglo largo que media entre el final de la Guerra de la Independencia y su refundación. ¿No existió durante todos esos años? ¿Mantuvo algún tipo de latencia residual? ¿Se refundó y volvió a desaparecer a lo largo de esas cinco décadas? Habrá que esperar a futuras investigaciones históricas para poder saberlo.

Puesto que la hermandad aparece citada en la encuesta de 1902 cabe pensar que debió de sobrevivir entre 1865 y ese año, aunque de nuevo nos encontramos frente a un considerable período de tiempo -casi cuatro décadas en esta ocasión- durante el cual nada sabemos acerca de lo que pudiera haber ocurrido. No obstante, y salvado el nuevo período anticlerical -mucho menos violento, eso sí, que los anteriores- que tuvo lugar entre el destronamiento de Isabel II en 1868 y la proclamación de Alfonso XII en 1874, los años de la Restauración serían proclives en general a las manifestaciones religiosas, por lo que no resulta disparatado suponer que la hermandad de los Santos Niños perviviera hasta 1902.

No obstante, este mismo documento nos informa de que en esa fecha -1902- la hermandad tan sólo contaba con trece hermanos y dos viudas, lo que hace suponer que sus actividades serían bastante reducidas. Y puesto que la hermandad fue refundada una vez más el 6 de agosto de 1924, cabe pensar que su existencia anterior no se prolongara mucho más allá de la realización de la aludida encuesta.

Aunque no puedo confirmarlo con exactitud, es posible que uno de los promotores de la nueva hermandad, ahora una asociación, fuera el sacerdote alcalaíno Rafael Sanz de Diego, muy activo entonces en la ciudad. Lo que sí he podido determinar es que en 1931, tan sólo siete años después de su constitución, la asociación, que se había centrado principalmente en los niños, fue la promotora de la adquisición del paso de la Borriquilla, mediante suscripción popular, para la procesión del Domingo de Ramos. Lamentablemente tan sólo cinco años después el estallido de la Guerra Civil provocaría la pérdida de este paso, desapareciendo también las imágenes de los Santos Niños que se custodiaban en la Magistral aunque por fortuna se pudieron salvar las reliquias.

En cuanto a la asociación, ésta siguió el mismo paradero que la inmensa mayoría de las cofradías complutenses, quedando desmantelada a causa del conflicto. Una vez concluida la guerra, pese al ambiente favorable alentado por el franquismo, las cofradías de la ciudad tardaron en levantar cabeza, y excepto las de los Doctrinos y el Val el resto -las que no desaparecieron para siempre- tardarían bastantes años en recobrar su actividad, no siendo hasta finales de la década de 1940 o incluso durante la de 1950 cuando se puede hablar de una actividad cofrade relativamente equiparable a la existente con anterioridad a la guerra.

En el caso concreto de la asociación de los Santos Niños tampoco sabemos la fecha exacta de su nueva refundación, que tuvo lugar en el primer lustro de la década de 1950. Ya aparece citada en 1955 en una relación de cofradías alcalaínas publicada en una hoja parroquial, y en esta ocasión su promotor fue el sacerdote Manuel Palero, que mantuvo su condición de cofradía esencialmente infantil. También se rescató el cuño de la medalla antigua, sustituyéndose la plata original por el más económico níquel.

Asimismo se implantó entonces la tradición de inscribir en la asociación a todos los niños recién nacidos en Alcalá, tal como fue mi caso entre otros muchos, siendo habitual que los niños desfiláramos en la procesión con nuestras respectivas medallas.

Esta nueva etapa de la asociación, bastante fecunda, apenas duró veinte años. A principios de la década de 1970, por razones que desconozco pero posiblemente relacionadas con el proceso de secularización que experimentó España durante los años postreros del franquismo, ésta dejó de cobrar las cuotas a los hermanos, desapareciendo en la práctica aunque pudo quizá seguir existiendo sobre el papel, por lo que más que de extinción podría ser más exacto hablar de consunción. En cualquier caso, su presencia en las fiestas patronales de la ciudad fue a partir de entonces nula.




Cupón correspondiente a la cuota anual de la fallida Asociación creada el año 2000


A diferencia de otras cofradías, que se recuperaron o incluso se refundaron a partir de finales de los años ochenta, la asociación de los Santos Niños siguió extinta hasta que en el año 2000, siendo Jesús Catalá el obispo titular de la diócesis, un grupo de jóvenes intentó rescatarla. Aunque la asociación se llegó a rehacer e inició una campaña de captación de cofrades, su recorrido no fue largo: conservo los cupones anuales de 2002 y 2003, pero el de 2004 ya no me lo pasaron al cobro, lo que me permite fijar este último año como el de su desaparición. Obviamente en tan breve plazo de tiempo no fue mucho lo que se pudo hacer, siendo de lamentar que cuando tan sólo un año después, en agosto de 2005, se inauguró el Jubileo de los Santos Niños, la nonata hermandad ya no existiera.


Nueva medalla de la Hermandad de los Santos Niños (2015)


Habrían de pasar otros diez años para que, ya con Juan Antonio Reig Pla como nuevo obispo, se hiciera un nuevo intento por recuperar la hermandad, en este caso bajo la figura jurídica de asociación diocesana, es decir, promovida y tutelada por el propio obispado.  Ya en 2011 se había instaurado la celebración de la reversión de las reliquias de los Santos Niños el 7 de marzo de 1568, por lo que dentro de la dinámica de potenciación del culto a los patronos complutenses éste era el lógico paso a dar a continuación. La asociación diocesana se creó oficialmente el día 6 de agosto de 2014, y su presentación oficial tuvo lugar el 10 de enero de 2015 en un acto celebrado en el Palacio Arzobispal. Desde entonces, ha participado activamente en el culto a los patronos complutenses.


Publicado el 11-1-2015
Actualizado el 26-6-2022