Alcalá de Henares en el siglo XXI
Turismo y patrimonio





Monumento a Don Quijote y Sancho Panza en la calle Mayor,
frente a la casa de Cervantes



En el nuevo siglo el turismo experimentó un auge muy notable, apoyado en una inteligente promoción y en iniciativas tales como la ya tradicional presencia en la Fitur, el consolidado Tren de Cervantes o la nueva Ruta Turística Literaria, un recorrido creado en 2004 que recoge los principales lugares de la ciudad vinculados con obras o autores fundamentales de la literatura española, a los que hay que sumar también actos multitudinarios tales como el Don Juan en Alcalá, la Semana Cervantina cuyo principal reclamo es el multitudinario Mercado Cervantino, la Semana Santa o la celebración de la concesión del título de Ciudad Patrimonio de la Humanidad, todos ellos de notable reclamo turístico, junto con la temporal -a lo largo de 2005- celebración del cuarto centenario de la publicación del Quijote, año en el que, según cálculos municipales, visitaron la ciudad más 1.800.000 turistas. En octubre de 2009 tuvo lugar la apertura del mirador de la torre de Santa María, ampliada en marzo de 2010 con la inauguración del pequeño museo -o centro de interpretación, tal como está de moda decir ahora- del Burgo de Santiuste, en la calle Cardenal Sandoval y, ya en diciembre de ese mismo año, con la musealización de la citada torre y la inauguración del Antiquarium y el Paseo Arqueológico en las murallas del Palacio Arzobispal.

2018, año en el que se cumplía el vigésimo aniversario de la concesión del título de Ciudad Patrimonio de la Humanidad, trajo a Alcalá el regalo de la declaración como fiestas de interés turístico nacional de la Semana Cervantina en marzo y de la representación del Don Juan en Alcalá en abril. Tan sólo un año más tarde, en junio de 2019, se logró idéntica nominación para la Semana Santa, contando así Alcalá con tres fiestas de interés turístico nacional.

Lamentablemente la pandemia de covid-19, cuyos primeros casos se detectaron en Alcalá en los primeros días de marzo de 2019, supuso la suspensión de esas tres celebraciones, aunque el Don Juan en Alcalá, recurrió a emitir por la página web del Ayuntamiento representaciones de años anteriores. No fueron los únicos casos, ya que también fueron suspendidas las dos ferias del libro, la de abril y la de octubre, las ferias de San Bartolomé incluido el festival taurino, que retornaba tras cuatro años sin él, las verbenas de los barrios y la práctica totalidad de las fiestas navideñas, incluida la cabalgata de reyes, que quedaron reducidas a poco más que la iluminación de las calles y la decoración de la plaza de Cervantes, con una noria como único elemento festivo. El XXII Aniversario de la declaración de Alcalá como Ciudad Patrimonio de la Humanidad se vio reducido a varios actos retransmitidos por vídeo y videoconferencias. Asimismo los museos, las salas de exposiciones y los teatros estuvieron cerrados durante varios meses. La situación volvió a repetirse en 2021, aunque algunos actos, sobre todo tras el verano y durante los últimos meses del año, pudieron celebrarse con más o menos restricciones, cosa que no ocurrió con las procesiones de Semana Santa que volvieron a ser suspendidas por segundo año consecutivo.

No fue hasta 2022 cuando todas estas actividades recobraron la normalidad, tanto las tres celebraciones de interés turístico nacional y la del aniversario de la declaración de Alcalá como Ciudad Patrimonio de la Humanidad así como la más reciente Complutum renacida, una recreación del pasado romano de Alcalá cuya primera celebración tuvo lugar en mayo de 2019 quedando interrumpida en 2020 y 2021.

Como cabe suponer el turismo fue uno de los mayores perjudicados por esta situación, razón por la cual Alcalá fue la anfitriona, en junio de 2021, del Foro del Foro Ciudades Patrimonio, Ciudades de Cultura, en el que con asistencia de expertos nacionales e internacionales, así como de representantes del Grupo de Ciudades Patrimonio de la Humanidad de España, se estudiaron las consecuencias de la pandemia así como las medidas a adoptar para potenciar el turismo cultural tras la grave crisis provocada por la pandemia.

El madrileño Museo Arqueológico Nacional acogió, en los meses postreros de 2004 una interesante exposición sobre la ciudad romana de Complutum, mientras en 2006 se inauguraban en Alcalá sendas exposiciones arqueológicas de calado, en Santa María la Rica la titulada Civilización 2000, dedicada a rememorar los dos milenios de herencia romana en Alcalá, y en el Museo Arqueológico otra dedicada a la ciudad visigoda de Recópolis, ubicada en la vecina provincia de Guadalajara. Paralelamente, en septiembre de 2006 se daba a conocer el descubrimiento de una importante necrópolis visigoda en los terrenos de El Encín. De nuevo en Madrid, en esta ocasión en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, entre septiembre y noviembre de 2008 estuvo abierta la exposición Alcalá, una ciudad en la historia.

En mayo de 2003 se abrió al fin la exposición permanente del Museo Arqueológico Regional -hasta entonces tan sólo había sido posible visitar las exposiciones temporales-, desarrollando desde entonces una excelente actividad digna de todos los encomios en la que cabe destacar, por su innegable interés local, la dedicada al Palacio Arzobispal que fue inaugurada en noviembre de 2019. En 2020 terminaron las obras de ampliación del museo en el solar de la antigua comisaría, en la calle del Cid Campeador, sin que se realizara ningún acto oficial de inauguración. Esta ampliación, destinada a albergar las secciones de investigación, talleres de restauración y servicios administrativos, permitió liberar el espacio que anteriormente ocupaban éstas, incrementándose en un 50% la superficie expositiva del museo. La inauguración de la nueva sala dedicada a la paleontología tuvo lugar el 23 de diciembre de 2021, y conforme a sus nuevos contenidos el nombre oficial pasó a ser Museo Arqueológico y Paleontológico de la Comunidad de Madrid.

También en 2003 se inauguró -volviéndose a cerrar tras la clausura de la primera exposición- lo que debería haber sido el museo José Caballero, de titularidad municipal -estaba radicado en Santa María la Rica- e infrautilizado desde entonces, salvo para la celebración esporádica de alguna exposición temporal. Lamentablemente este museo no llegaría a cuajar, ya que en diciembre de 2008 el ayuntamiento alcalaíno comunicó oficialmente la ruptura definitiva de las negociaciones con los herederos del pintor para el establecimiento en Alcalá de la fundación que gestiona su obra, con lo cual la ciudad perdió de forma definitiva el proyectado museo. Desde entonces este recinto ha sido dedicado a sede de diferentes exposiciones, entre ellas la de Justo y Pastor. Origen de una ciudad, con motivo del 450 aniversario de la reversión de las reliquias de estos santos, del 6 de marzo al 8 de abril de 2018, o la del Legado Lope Huerta-Revilla Bel, programada del 28 de febrero al 29 de marzo de 2020, aplazada por la pandemia de covid-19 y vuelta a abrir del 9 al 24 de junio de este mismo año.

Poco después, en junio de 2003, se reabrió el Corral de Zapateros tras una larga e interminable sucesión de restauraciones, aunque no sería inaugurado oficialmente hasta abril de 2005. La otra cara de la moneda fue el cierre temporal, entre septiembre de 2003 y agosto de 2004, del Teatro Salón Cervantes, que tuvo que ser sometido a una restauración urgente debido a la aparición de unas grietas que amenazaban un posible desplome del edificio. Más polémica fue la creación en la Capilla del Oidor del Centro de Interpretación -léase exposición permanente del material de temática cervantina que se conserva en el Ayuntamiento- Los universos de Cervantes, ya que esta iniciativa supuso la pérdida de ese local como sala de exposiciones. Inaugurado en octubre de 2006 coincidiendo con el aniversario del bautismo del autor del Quijote, el Centro de Interpretación no pudo empezar con peor pie, ya que tan sólo un día más tarde hubo de ser cerrado de forma precipitada al detectarse un importante problema de goteras en el tejado, no pudiendo reabrirse hasta principios de noviembre.

Peor suerte corrieron las anunciadas obras de adaptación de la nave principal de la antigua fábrica de Gal para sede del museo de Motociclismo, que durante años estuvieron en el limbo hasta que, en una repetición de lo ocurrido con el frustrado museo de José Caballero, en 2018 el Ayuntamiento comunicó la anulación definitiva del proyecto. Las obras de rehabilitación -salvo el torreón- fueron terminadas en febrero de 2020, utilizándose la nave para el rodaje de varios programas televisivos hasta que en las navidades de 2021 se inauguró la exposición Museo de la Moto Made in Spain, estando prevista su posible conversión en un museo permanente. A su vez, en la planta inferior del edificio se expone desde hace años, durante las fiestas navideñas, el belén monumental de la Asociación Complutense de Belenistas.

Siguiendo la estela de la recuperación de la fábrica de Gal, el Ayuntamiento comunicó en mayo de 2020 la posibilidad de convertir la fábrica de Roca, cerrada desde hace años, en un Recinto Ferial y un Palacio de Congresos, al tiempo que aprobaba la protección estructural del edificio. Finalizado 2022 no se había concretado nada al respecto.

Otro importante proyecto cultural, la creación de un museo dedicado a la importante dinastía de pintores de los Madrazo en el edificio del antiguo Hospital de San Lucas, también acabó frustrado sin que el edificio haya recibido ningún otro uso. Más suerte hubo con la inauguración, en junio de 2021, del Museo de las Artes Gráficas de la Universidad de Alcalá, fruto de la cesión de la colección particular de Ángel Gallego Esteban. Instalado provisionalmente en la Facultad de Derecho, está previsto que su sede definitiva esté radicada en el antiguo cuartel del Príncipe.

Asimismo, en diciembre de 2021 el Ayuntamiento y la Bripac firmaron un convenio para la instalación del museo de esta unidad militar en el Loft Contemporáneo, un anexo al Hospital de San Lucas. Este museo estuvo radicado en la base militar Fernando Primo de Rivera hasta la marcha de la Bripac a su nuevo acuartelamiento de Paracuellos de Jarama aunque no estaba abierto al público dada su ubicación en un recinto militar. La inauguración del museo, bajo el nombre de Sala Museográfica de la Brigada Paracaidista, tuvo lugar el 23 de febrero de 2022, aniversario de la fundación de la Bripac.

Obras quizá de índole menor, pero asimismo reseñables, ocurridas durante 2007 fueron la reparación de la presa de Cayo, rota por las aguas del Henares a principios de año y terminada en octubre, y el inicio de la restauración de parte de las murallas a finales de año. Otra presa, la de las Armas, fue también reparada a finales del verano de 2017 tras llevar 32 años rota, quedando pendiente al terminar 2022 la reparación de la de la Esgaravita.

Una buena noticia, no por esperada menos importante, fue el inicio de las obras de construcción del Parador de Turismo en el solar del antiguo colegio de Santo Tomás de Aquino, siguiendo un diseño arquitectónico vanguardista que poco o nada tenía que ver ni con la estructura barroca del edificio original, ni con las construcciones adyacentes que se realizaron ya en el siglo XIX tras su conversión en prisión. Puesta la primera piedra por el ministro Rodrigo Rato en febrero de 2004, las obras no comenzaron realmente hasta diciembre de ese mismo año. Con un año de retraso sobre la fecha inicialmente prevista, el parador abrió sus puertas -aunque sin inaugurar oficialmente- en septiembre de 2008. También a finales de 2004 el antiguo depósito de libros de la Biblioteca Nacional, situado en la carretera de Meco, se transformó en segunda sede de esta institución, abriendo por vez primera sus puertas al público.

La cara y la cruz del patrimonio histórico complutense las trajo el invierno de 2006, ya que a finales de enero de ese año, víctima de las inclemencias del tiempo y del abandono, se derrumbaba parte de la Puerta de Burgos, reconstruida entre septiembre de 2009 y junio de 2010, mientras el 2 de febrero se iniciaba la reconstrucción de la cúpula de la iglesia de las Juanas, demolida a mediados del siglo XIX, con la colocación sobre el tambor del armazón de madera, concluyéndose las obras en otoño de ese mismo año. La inauguración, en octubre de 2007, de un museo en este convento supuso la culminación de esta encomiable iniciativa. En noviembre de 2009 se acometería la restauración de la torre y la capilla de las Santas Formas, en la parroquia de Santa María, muy deterioradas por el paso del tiempo, concluyéndose las obras en enero de 2011 y siendo bendecida la capilla por el obispo en marzo de ese mismo año.

Pérdidas notables de patrimonio, ocurridas en 2008, fueron la demolición en enero del molino de la Esgaravita y el derrumbe accidental en abril de parte del molino de Cayo, aunque en ambos casos y en los dos molinos restantes -el de los García y el de las Armas-, también arruinados, la verdadera causa común fue el abandono al que estuvieron sometidos durante décadas estos vestigios del pasado industrial de la ciudad. En julio de 2021 el Ayuntamiento comunicó su intención de recuperar el molino de Cayo, sin precisar el alcance que tendría esta intervención.

En agosto de 2008 fue demolida asimismo la ermita de los Santos Niños, con objeto de liberar el Paredón del Milagro y las ruinas de la basílica romana sobre los que se asentaba. En realidad la ermita, construida a principios de los años sesenta por iniciativa particular, carecía del menor valor artístico, se encontraba en desuso y entorpecía y afeaba el yacimiento arqueológico en el que se encontraba, lo cual justifica, pese a algunas protestas, su derribo. No obstante, es de lamentar que no se previera la construcción de un nuevo templo en sus proximidades, dada la profunda vinculación del lugar con la tradición y el culto a los patronos complutenses. Otra importante intervención arqueológica fue, en febrero de 2011, la inauguración de la bóveda cubierta que protege a la Casa de los Grifos, junto al foro de Complutum, la cual quedó abierta al público.

Otra importante restauración, la de los patios de la Universidad y la capilla de San Ildefonso, se inició en la primavera de 2010 dándose por terminada en diciembre de 2013, año en el que también concluyeron las complejas obras de restauración del Hospital de Antezana. En agosto de 2016 comenzó la restauración de la fachada de la Universidad, concluida en marzo de 2017 y galardonada en las convocatorias de 2018 con el Premio Unión Europea/Europa Nostra, el Premio Especial de la Fundación de Casas Históricas y Singulares y el tercer Premio de la Arquitectura Técnica a “la mejor actuación” en una Ciudad Patrimonio de la Humanidad. La restauración de los edificios monumentales de la manzana cisneriana concluyó con la de la fachada de la capilla de San Ildefonso, iniciada en noviembre de 2019 y terminada a principios de 2020. En noviembre de este último año les llegó el turno a las columnas de la lonja de la fachada de la Universidad, que fueron reparadas y limpiadas junto con las cadenas que sustentan.

Más accidentadas resultaron las obras de rehabilitación de los cuarteles del Príncipe y Lepanto. Iniciadas las obras en 2009 durante el rectorado de Virgilio Zapatero, demoliéndose el ala que linda con la plaza de San Diego, de la que se conservaron tan sólo las fachadas, la llegada en 2010 del nuevo rector Fernando Galván supuso la paralización del proyecto inicial, tildado de faraónico. Tras un cambio radical de éste, que fue sustituido por otro más razonable, los trabajos se reiniciaron en octubre de 2011 con la importante novedad de la construcción de un museo para albergar los restos arqueológicos del desaparecido convento de San Diego, concluyéndose la primera fase de los mismos en diciembre de 2013. En el área rehabilitada, correspondiente a la parte del cuartel del Príncipe lindante con la plaza de San Diego, rebautizado como Edificio Cisneros, se instalaron en 2014 la Biblioteca Central de Humanidades, también conocida como Centro de Recursos para el Aprendizaje y la Investigación (CRAI), y en 2016 el Museo de Arte Iberoamericano.

En 2016 comenzaron las obras de rehabilitación del vecino cuartel de Lepanto, en la calle de los Colegios, para sede de la residencia universitaria Lope de Vega, que fue inaugurada en 2017. Por último, la Universidad comunicó en marzo de 2021 la rehabilitación de la Galera, la antigua cárcel de mujeres que se encontraba en un preocupante estado de conservación, obras que al finalizar 2022 seguían sin ser abordadas. Las que sí se iniciaron en febrero de 2023 fueron las del cuartel del Príncipe, como continuación de las fases ya rehabilitadas.

En 2011 se iniciaron las obras de restauración del convento de las Bernardas. En una primera fase, entre enero de 2011 y julio de 2013, se restauraron la Casa de la Demandadera y el claustro menor del convento de las Bernardas. En abril de 2016 se acometieron en una segunda fase las de la iglesia, el claustro mayor y la fachada, que quedaron concluidas en mayo de 2018. La reparación de las cubiertas de la parroquia de Santa María fue terminada en febrero de 2019, y en septiembre de este mismo año comenzó la restauración de la iglesia de San Felipe; interrumpidas las obras en 2020 a causa de la pandemia de covid-19, se reanudaron varios meses más tarde. Aunque estaba prevista su terminación para principios de 2021, al terminar este año la iglesia todavía no había sido abierta de nuevo al culto. En enero 2021 se acometieron actuaciones de urgencia para frenar los derrumbes en algunos de los edificios semirruinosos del recinto del Palacio Arzobispal, en los que está previsto instalar la Casa de los Arqueólogos.

Dos restauraciones menores, pero significativas, tuvieron lugar en 2020. En junio de este año se inauguró el nuevo edificio de los juzgados dedicado a las bodas civiles y sala de reuniones, fruto de la rehabilitación de una vieja construcción situada en la calle de Santo Tomás frente al Parador. Unos meses más tarde, en noviembre, le llegó el turno al antiguo convento de Capuchinos situado en la calle Santiago, que se convirtió en la sede de la concejalía de Patrimonio Histórico. También en octubre concluyeron las obras de rehabilitación de parte de las fachadas del convento de Mercedarios Descalzos, más conocido como cuartel de Sementales, concretamente las lindantes con la calle de las Siete Esquinas. Por su parte, en noviembre de 2021 se inició la restauración de la escalera y la cúpula del colegio de las Escolapias, antigua residencia del fotógrafo francés afincado en España Jean Laurent, y en enero de 2023 el Ayuntamiento presentó el proyecto de rehabilitación del molino Borgoñón o de Cayo, con la intención de instalar allí un centro de interpretación.

Muy polémica resultó la demolición en enero de 2020 de la antigua fábrica de hielo Gallo, en la calle de Nebrija, posiblemente uno de los primitivos edificios universitarios del siglo XVI. Finalmente el derribo no fue total, conservándose la crujía norte del patio porticado y la fachada que limitaba con la cerca de la ciudad.

El ornato de la ciudad tuvo su reflejo en el descubrimiento de sendas lápidas conmemorativas del nacimiento del emperador Fernando de Bohemia (2003) y de la muerte de Isabel la Católica (2004), reina a la que a finales de ese mismo año se le erigió una estatua en la confluencia de las plazas del Padre Lecanda y Palacio, obra del escultor Santiago de Santiago, la cual hubo que trasladar a otro lugar más retirado de la última de estas dos plazas a finales de 2006 para protegerla de los ataques vandálicos. Una tercera lápida, descubierta en la fachada del antiguo colegio de la Madre de Dios en diciembre de 2004 recordó el aniversario de la publicación de la primera parte del Quijote, y una cuarta fechada en octubre de 2005 y ubicada en un lugar un tanto excéntrico, el parque situado en la intersección de la avenida de Pastrana con la prolongación de la ronda Fiscal, reproduciendo un fragmento del Quijote en el que se cita a Alcalá y a la cuesta del Zulema.

A ellas hay que sumar el monumento a las víctimas de los atentados de Atocha y la exitosa escultura de don Quijote y Sancho sentados ante la casa natal de Cervantes, obra esta última del escultor Pedro Requejo, inaugurados respectivamente el 10 de marzo y el 24 de abril de 2005. En 2006 la ciudad contó con otros dos nuevos monumentos: en julio, la escultura dedicada al papa Juan Pablo II, obra también de Pedro Requejo, instalada en el Jardín de los Sentidos (rebautizado como Jardín de Juan Pablo II), en el barrio del Ensanche, y en noviembre un monumento en homenaje a la Aviación Española ubicado junto a la facultad de Ciencias, en el campus universitario, en recuerdo a que ese recinto fue la sede de la antigua base aérea de Alcalá. Un año más tarde, en abril de 2007, se inauguraría una estatua dedicada a Catalina de Aragón obra del escultor Manuel González Muñoz, la cual fue ubicada en la plaza de las Bernardas junto al torreón del Tenorio.

En 2007 llegó el turno a la restauración de dos de las más antiguas estatuas de la ciudad, la de Cisneros y la de Cervantes. La primera, muy deteriorada por el vandalismo, fue retirada de la plaza de San Diego en enero de ese año y reemplazada por una réplica; aunque se dijo que tras ser restaurada volvería a ser colocada en el patio de Santo Tomás de Villanueva, dentro del recinto de la Universidad y donde ya estuviera ubicada durante muchos años, finalmente fue instalada en el vecino patio de Filósofos el 30 de enero de 2018. La de Cervantes, por su parte, fue sometida a una profunda restauración in situ durante los últimos meses del año, siendo concluida esta intervención en diciembre de 2007.

Aunque efímera, dado que abarcó desde octubre de 2007 hasta enero de 2008, cabe reseñar la instalación por diversos puntos de la ciudad, tanto en calles y plazas como en el interior de distintos edificios universitarios, de una exposición itinerante formada por una cincuentena de esculturas del artista mexicano Sebastián (Enrique Carvajal), una iniciativa que suscitó tanto aplausos como críticas, al no encajar su estilo vanguardista con los entornos del casco antiguo elegidos para su asentamiento. Terminada la exposición, el ayuntamiento adquirió la más significativa de estas obras, un enorme Quijote que, tras estar plantado durante varios meses frente a la capilla del Oidor, en mayo de 2008 fue instalado de forma definitiva en la rotonda situada en la intersección de la Vía Complutense con la calle de Sebastián de la Plaza, junto al barrio de San Isidro.

En octubre de 2009, coincidiendo con la celebración del aniversario del bautismo de Cervantes, se descubrió en la plaza de San Diego un monumento al Camino de la Lengua Castellana, común en su diseño con otros equivalentes instalados en las otras poblaciones que forman parte de esta institución. Víctima del vandalismo, tuvo que ser retirado en el verano de 2015 y, tras ser restaurado, se reubicó en octubre de 2018 en el jardín trasero de la Casa de los Lizana.

En febrero de 2017 se descubrió una lápida, en la fachada del Parador que linda con la calle de Santo Tomás, donde entonces estaba la entrada a la cárcel, en homenaje a Melchor Rodríguez García, el Director General de Prisiones que evitó una masacre de prisioneros en diciembre de 1936. Siete meses después, en septiembre, otra lápida recordó la memoria de las víctimas de la explosión del polvorín acaecida en 1947. Un año más tarde, en mayo de 2018, se inauguró un sencillo Memorial en recuerdo a los presos republicanos fusilados por el franquismo en la ribera del Henares aguas arriba de la ermita del Val. En 2019 se levantó otro similar junto a las tapias del cementerio, pero su inauguración se demoró hasta noviembre de 2021.

Otras lápidas descubiertas en Alcalá fueron en 2021 la conmemorativa de la visita de los reyes de España al Instituto Cervantes y, ya en 2023, la de la estancia de la Academia de Artillería en el Colegio de Málaga entre 1830 y 1837, una reproducción en bronce del epitafio original de la tumba de Nebrija en la capilla de San Ildefonso y el recordatorio de la rehabilitación de la plaza de Barro cuarenta años después de que la movilización vecinal la salvara de la especulación urbanística.

El 1 de noviembre de 2020 el Cementerio Jardín inauguró en su recinto un memorial en recuerdo de quienes fallecieron en soledad durante la pandemia de covid-19. Se trata de El Abrazo, una escultura en bronce obra de Ana Hernando que representa un abrazo entre dos personas. Ésta era una de las tres obras idénticas que Funespaña encargó para los cementerios que gestiona en Alcalá, Leganés y Pozuelo de Alarcón, y una cuarta réplica fue instalada en marzo de 2022 en la puerta de Madrid, también como homenaje de la ciudad a las personas fallecidas a causa de la pandemia.

El 14 de marzo de 2021 le llegó el turno al monumento en homenaje a Forges, un humorista muy vinculado a Alcalá fallecido en 2018. Éste está constituido por dos elementos, una fuente en la rotonda que regula el cruce de la Vía Complutense con Caballería Española y Marqués de Alonso Martínez, y un mural que reproduce sus características viñetas.

En septiembre de 2022 se erigió en la plaza de la Paloma, frente al edificio de los juzgados, un memorial en recuerdo a las víctimas de ETA alcalaínas o vinculadas con la ciudad. Se trata de un sobrio pilar metálico en el que están grabados los nombres de once personas, policías y militares en su mayor parte, así como el lugar y la fecha de los atentados. La inauguración del monumento estaba proyectada para junio de 2019, y ésta es la fecha que figura en el mismo, aunque a causa de la pandemia ésta tuvo que ser aplazada durante más de tres años.

Cabe reseñar, por último, la restauración del sepulcro del Arzobispo Carrillo, muy deteriorado por el incendio de la Catedral-Magistral en 1936 y el posterior saqueo. Tras recuperarse dos de los relieves originales localizados en Navarra y Londres, en marzo de 2018 se pudo contemplar, ya restaurado, en el museo diocesano. Una tercera pieza, en esta ocasión el torreón que remataba una de las esquinas, fue descubierto en la finca El Batán de Chinchón, sede de Asociación Garaldea, y tras ser arrancado del muro donde estaba adosado desde hacía más de cuatro décadas, fue trasladado a dependencias del obispado el 3 de septiembre de 2020 para, una vez restaurado, ser reintegrado en el sepulcro.

En el apartado de arqueología hubo también novedades importantes. En agosto de 2009 se abrió al público el foro de Complutum, a mediados de 2012 se amplió el área visitable de la antigua ciudad romana y en mayo de 2017 se incorporó también a las visitas turísticas la Casa de los Grifos, donde en 2021 se siguieron descubriendo importantes frescos. Asimismo, durante el verano de 2017 se desarrolló una campaña de excavaciones en la meseta superior del cerro del Viso, asentamiento de la primitiva ciudad de la época republicana hasta que tuvo lugar su traslado al Juncal, la cual tuvo continuidad con una segunda campaña en el verano de 2018. La tercera campaña de excavación, prevista para el verano de 2020, hubo de ser suspendida por la pandemia de covid-19. Los trabajos se reanudaron en el verano de 2021 con un sondeo por georradar y fotografías aéreas que confirmaron la existencia de importantes estructuras bajo el terreno, y una nueva campaña tuvo lugar en septiembre de 2022.

2021 también resultó fructífero para las excavaciones en el yacimiento del castillo árabe, en el que se desenterraron más de cien metros de muralla y los cimientos de dos torres hasta ahora desconocidas. Este mismo año le llegó el turno a la plaza de los Santos Niños, posible ubicación de un yacimiento paleocristiano y visigodo, comenzando las excavaciones en noviembre en la zona más cercana a la calle de la Tercia, después de que un sondeo previo revelara la existencia de estructuras arqueológicas. Al finalizar el año se habían descubierto varias tumbas tardomedievales bajo las cuales, una vez levantadas, aparecieron restos de edificios datados en la época de la antigüedad tardía, es decir, cuando el obispado complutense se creó junto a la tumba de los Santos Niños. En 2022 se incoó su catalogación como Bien de Interés Cultural.

Cabe reseñar asimismo dos iniciativas que tuvieron lugar en 2021; en mayo, el acuerdo entre el Ayuntamiento y la Confederación Hidrográfica del Tajo para crear en Alcalá un Centro de Interpretación del Río Tajo -cabe suponer que para la totalidad de su cuenca- radicado en la plaza de la Juventud, y la celebración en octubre de la Mobile Week Alcalá, una muestra dedicada a los últimos avances tecnológicos y los retos que plantean, vinculada a la Mobile World Capital Barcelona y organizada por el Ayuntamiento en colaboración con la Universidad y el Colegio Oficial de Ingenieros de Telecomunicación, la cual tuvo una segunda edición en 2022.



Publicado el 10-12-2007
Actualizado el 14-3-2023