Actividad extravehicular



Se denomina actividad extravehicular, también conocida por las siglas en inglés EVA -de Extra Vehicular Activity-, a las operaciones realizadas por los astronautas fuera de cualquier tipo de vehículo o estación espacial, sin más protección que su propio traje espacial. Por esta razón, también se la conoce coloquialmente como paseo espacial.

El primer paseo espacial de la historia tuvo lugar el 18 de marzo de 1965, siendo su protagonista el cosmonauta soviético Alexei Leonov, tripulante de la Vosjod 2, siendo replicado apenas tres meses después por el norteamericano Edward White a bordo de la cápsula Gemini 4. Aunque se trató de un hito en la exploración espacial, lo cierto es que la duración de ambos paseos fue extremadamente breve, tan sólo 10 minutos en el caso del soviético y poco más de 20 en el del norteamericano. Mucha mayor trascendencia tuvo el primer aterrizaje en la Luna del Apolo 11, el 21 de julio de 1969, durante el cual los astronautas Neil Armstrong y Edwin Aldrin se pasearon por la superficie lunar durante casi 20 horas. A ellos siguieron otros diez astronautas más a bordo de las posteriores misiones Apolo, pero a pesar de que sus actividades en la superficie lunar fueron desde el punto de vista científico mucho más importantes, no lograrían la repercusión mundial de sus predecesores.

Con el paso del tiempo, y pese a que ningún astronauta ha vuelto a pisar la Luna, las actividades extravehiculares se han convertido en algo rutinario, tanto en las estaciones espaciales como en los vuelos del transbordador espacial, lo que no quiere decir que no hayan revestido importancia, como ocurrió con la espectacular reparación del defectuoso espejo del telescopio espacial Hubble, realizada en órbita en diciembre de 1993 por los tripulantes del Endeavour.

Sin embargo, en septiembre de 2008 un paseo espacial figuró de nuevo en las portadas de todos los medios de comunicación no por su duración -tan sólo quince minutos- ni porque durante el mismo se realizara ninguna tarea excepcional, sino porque su protagonista fue el astronauta chino Zhai Zhigang, comandante de la misión Shenzhou 7, siendo la primera vez en la historia de la astronáutica que lo realizaba un astronauta ajeno a una misión espacial norteamericana o rusa.


Publicado el 5-11-2008