Precesión equinoccial



Es un movimiento de bamboleo del eje de rotación terrestre, similar al de una peonza girando, que hace que la proyección imaginaria del mismo sobre la bóveda celeste vaya desplazándose a lo largo de unos 26.000 años dibujando una circunferencia.

Una de las consecuencias de este movimiento periódico es el desplazamiento de los dos polos celestes, lo que hace que no siempre haya sido la actual Estrella Polar la que marque el polo norte geográfico.

Este movimiento es responsable asimismo del desplazamiento de los signos del zodíaco, que en tiempos de la culturas babilónicas correspondían con las constelaciones del mismo nombre, pero actualmente coinciden con el signo contiguo. Se trata, pues, de uno de los múltiples argumentos que descalifican el presunto -y falso- carácter científico de la astrología.


Publicado el 10-9-2009