Maltrato informativo a Alcalá de Henares (II)



Tengo el placer de dirigirme a usted para expresarle una vez más mi malestar por el maltrato informativo (por acción o por omisión) al que a mi entender somete sistemáticamente el diario EL PAIS a la ciudad de Alcalá, cuestión ésta que me ha motivado a enviar varias cartas a esta misma sección siempre con la misma queja sin que, al parecer, hayan servido para enmendar este problema a pesar de que en varias ocasiones me fue reconocida la razón de las mismas.

Y así, si en otras ocasiones exponía lo injusto que resultaba resaltar exageradamente todos aquellos sucesos que ocurrían en Alcalá dando así una imagen sesgada de la ciudad a los lectores de su periódico, en esta ocasión he de mostrar mi desagrado ante la omisión de una noticia que encuentro objetivamente importante no sólo para Alcalá sino también para Madrid y que, inexplicablemente, no ha existido ni por asomo en las páginas de EL PAIS: La creación, los días 12 y 13 de octubre, de las nuevas diócesis de Getafe y Alcalá.

Cierto es que la línea editorial de EL PAIS, como periódico laico que es, prima menos a las noticias religiosas que otros diarios madrileños, pero cierto es también que el hecho concreto de la escisión de la antigua diócesis madrileña en tres nuevas demarcaciones trasciende del ámbito puramente religioso para convertirse en una importante noticia social y, si se me apura, histórica que afecta a todo el territorio provincial; pero lo cierto es que en esos días y en los inmediatos anteriores y posteriores, la única noticia que encontré haciendo alusión a Alcalá fue una relativa a una excursión realizada por las antiguas alcantarillas de la ciudad... Sinceramente, creo que sobra todo comentario al respecto.

Por si fuera poco el domingo 13 de octubre, fecha en la que se constituía el nuevo obispado de Alcalá y día posterior al de la análoga ceremonia de Getafe, la sección Madrid de EL PAIS dedicaba nada menos que dos páginas completas sobre un total de seis -y apenas cuatro si descontamos la publicidad- a un reportaje sobre las misas celebradas en distintos puntos de la capital y la provincia; un reportaje interesante, sin duda, pero completamente intemporal y por lo tanto perfectamente susceptible de haber sido publicado cualquier otro domingo. Creo humildemente que en vez de enviar a todos los redactores de esta sección a misa tal como se anuncia en la entradilla del artículo, hubiera merecido la pena encargar a alguno de ellos que cubrieran las ceremonias de Getafe y Alcalá.

Vuelvo pues, ya para finalizar, a expresar mi añejo y desatendido ruego, que no es otro sino el que se trate a Alcalá de una manera equilibrada en lo que a información se refiere: O bien se dan todas las noticias sobre ella, sean buenas o malas, o bien no se da ninguna si es que mi ciudad no entra dentro de sus prioridades informativas; pero, por favor, no sesguen la información en el sentido desfavorable para Alcalá. Los alcalaínos también tenemos nuestra sensibilidad, y no nos agrada que en Madrid o en cualquier otro punto de España se tenga una imagen equivocada de una ciudad que lucha día a día por ser mejor.


Enviada el 25-10-1991 a EL PAIS