Sobre Gran Hermano



En el ejemplar de 20 Minutos del día 17 de septiembre su colaborador Isra Álvarez arremetía contra todos detractores de Gran Hermano, a los que tildaba de listillos e incluso de acomplejados, argumentando que se trataba de un programa de entretenimiento y que, como tal, no tenía por qué meterse en profundidades intelectuales de ningún tipo. Y tenía razón, pero sólo en términos generales ya que sus argumentos, que comparto en gran parte, no son aplicables a Gran Hermano.

El problema no estriba en que Gran Hermano sea un programa de entretenimiento sin mayores pretensiones, sino en que se trata de un producto televisivo en el que la vulgaridad y la zafiedad se han convertido en su seña de identidad. Han sido muchos los programas de entretenimiento emitidos por las distintas cadenas televisivas españolas, algunos tan afamados como Un, dos, tres..., y ninguno de ellos recibió nunca las críticas que ha cosechado merecidamente Gran Hermano; la gente los veía o no los veía según le apeteciera, pero no molestaban a nadie. Gran Hermano y, por extensión, una parte importante de la programación de Telecinco, son mucho más que dignos programas de entretenimiento, son televisión basura. Y no es lo mismo.


Publicada el 19-9-2014 en 20 Minutos