Alcalá de Henares y la CAM



Me dirijo de nuevo a usted para matizar un comentario puntual del artículo que, con el título Sobre la imagen de Guadalajara, firmó Javier Delgado Gómez en el ejemplar de fecha 4 de diciembre de este semanario, artículo con cuyo fondo coincido.

Sin embargo, encuentro poco ajustada a la realidad la afirmación -cito textualmente- “el ingente esfuerzo económico realizado por Madrid en la puesta en valor de Alcalá como capital cultural”, y ello por una razón muy sencilla: Si por algo se caracteriza la comunidad autónoma madrileña es por su centralismo desmedido y por su escasa, escasísima atención hacia las peculiaridades y las necesidades del resto de las poblaciones de la provincia fuera de la omnipresente y aplastante -en todos los sentidos- capital.

Sí es cierto que en estos últimos años se ha realizado un importante esfuerzo en aras de potenciar los importantes rasgos culturales e históricos de nuestra ciudad, pero no menos cierto es que tal iniciativa ha recaído casi exclusivamente en entidades puramente alcalaínas tales como el ayuntamiento, la universidad y, más recientemente, por el recién restaurado obispado complutense. Es realmente muy poco lo que ha hecho el gobierno autónomo en este sentido, y buena parte de ello, como ocurre con la gestión de la casa de Cervantes, fue simplemente heredado de la antigua administración y no creado por iniciativa propia; y en cuanto a otro tipo de iniciativas tales como restauración de edificios o urbanización de calles y plazas, lo poco que el gobierno autónomo ha hecho en Alcalá ha resultado tan discutible que, ciertamente, les aseguro que preferimos que en un futuro se olviden de nosotros.

Por lo demás, ¿sabían ustedes que no existe en Alcalá -ciento sesenta mil habitantes, un cuarto de millón aproximadamente con la comarca- ni la más mínima delegación del gobierno autonómico que nos permitiera evitar viajes a Madrid? ¿Conocían el hecho de que en Alcalá no hay una sola biblioteca pública dependiente del gobierno autonómico ya que todas -salvo la de la Caja de Ahorros- son municipales? ¿Ignoraban que, salvo unas difuminadas rutas turísticas dibujadas en los planos y el ya citado mantenimiento de la casa de Cervantes, el gobierno madrileño no está haciendo absolutamente nada por potenciar el turismo y que la única oficina de turismo es asimismo municipal? ¿Sabían ustedes que el Canal de Isabel II está haciendo lo imposible por zamparse a Alcalá y, por supuesto, a su concesión de agua a pesar de lo absurdo que resulta desde todos los puntos de vista segregarla de su entorno natural? ¿He de recordar, por último, entre otros muchos olvidos, que no existe la menor comunicación por transporte público entre Alcalá -y el resto del valle del Henares, por supuesto- y el aeropuerto de Barajas a pesar de su cercanía?

Como dice la conocida frase, al César lo que es del César.


Enviada el 9-12-1992 a Nueva Alcarria