Cuando hace ya veinte años colaboré en la redacción de la guía de Alcalá durante tres ediciones consecutivas, por razones diversas se me quedaron varias cosas en el tintero, una de las cuales fue una relación de estancos, unos establecimientos que a todos nos resultan familiares aunque no fumemos dado que en ellos se pueden adquirir, además claro está de tabaco, otras cosas de uso cotidiano tales como sellos, bonobuses y abonos de transporte, timbres oficiales, impresos para la declaración de la renta, postales...

Lo que ya no es tan conocido es que su nombre se debe a que en ellos se han estado vendiendo, desde hace siglos, las denominadas mercancías estancadas -con el significado etimológico de retenidas-, es decir aquéllas cuya venta era monopolio del estado, que a su vez cedía la concesión de estos establecimientos a particulares conforme unas determinadas condiciones. Ésta era una de las maneras que tenía el estado de recaudar fondos antes de que se establecieran los impuestos modernos tales como el IVA o el IRPF.

A lo largo de la historia la relación de mercancías estancadas ha sido variada, abarcando algunas tan de primera necesidad como la sal -a causa de lo cual llegó a haber motines- y otras más anecdóticas como los naipes, mientras en algunos países como los escandinavos todavía hoy sigue siendo un monopolio estatal la venta de bebidas alcohólicas. Conforme pasó el tiempo se fue liberando el comercio de la mayor parte de estas mercancías, aunque el monopolio de venta de algo tan cotidiano como las cerillas se mantuvo hasta una fecha tan tardía como 1956 mientras persiste para el tabaco.

En Alcalá existen en la actualidad algo más de una treintena de estancos, el más reciente por ahora el nº 34, ubicado en Espartales Norte en la avenida de Alfonso VI. Algunos de ellos han cambiado en fechas recientes de ubicación: el nº 1 se trasladó de la calle Mayor a la Vía Complutense, el nº 6 de la plaza de Cervantes a la avenida de los Reyes Católicos, el nº 9 del paseo del Val a la Vía Complutense y el nº 10 de la calle Escudo a la de José María de Pereda.

Un caso particular es el del estanco de la estación de Renfe (ahora Adif). Pese a ser uno de los más antiguos de la ciudad nunca estuvo numerado por estar radicado en el interior del recinto ferroviario al igual que ocurría en Madrid con los que estaban dentro de los edificios de los ministerios u otros organismos oficiales, los cuales no se regían por la normativa común. De allí se trasladó a uno de los locales exteriores de a estación, en la calle de Pedro Laínez, y posteriormente al paseo de la Estación con el número 27, mucho más elevado que el que le hubiera correspondido por su antigüedad real, lo que parece indicar que esta asignación fue reciente, posiblemente tras su instalación en la calle Pedro Laínez.

En el listado aparecen varios huecos. El nº 12 estuvo en la calle del Tinte y cerró hace años, sin que se haya cubierto su vacante. Quedan vacíos también los nº 28, 32 y 33, a la par que tengo registrados otros dos sin número en los centros penitenciarios Madrid II (Alcalá-Meco) y Madrid I Mujeres.

Una fuente indirecta de información son los códigos de los estancos a nivel nacional, que en el caso de la provincia de Madrid comienzan por 28 seguido de cuatro cifras. Por lo general los valores crecientes de los códigos, en los que los estancos de Alcalá están entremezclados con los de otras poblaciones de la provincia, coinciden con su numeración local, aunque en algunas ocasiones no ocurre así. Siguiendo este listado el 28 correspondería a un estanco de Meco, el único existente en la vecina localidad; lo que no entiendo es por qué le reservaron una numeración de Alcalá, cuando en su rótulo figura con el número 1... de Meco.

En cuanto a los huecos de los nº 32 y 33 cabe suponer que correspondan a los de los dos establecimientos penitenciarios. Pero según los códigos el de la cárcel masculina se encontraría entre los nº 30 y 31, y el de mujeres, con un código posterior -es decir, con la licencia concedida más tarde- estaría entre el 31 y el 34. Con lo cual tampoco encajan en los huecos, ya que deberían estar en los nº 32 y 33. O, dicho de otra manera, parece como si el de la calle Jorge Luis Borges -el 31- estuviera trocado, de acuerdo con los códigos, con el de la prisión masculina, ya que según éstos el 31 sería el de la prisión masculina y el 32 el de Jorge Luis Borges, mientras al de la prisión femenina le correspondería el nº 33. Pero como no resulta posible, o cuanto menos fácil, acceder a los dos recintos penitenciarios, no tengo una manera fácil de confirmarlo.

Por consiguiente, el listado queda de esta manera:

Nº	Dirección	Nº	Dirección
1	Vía Complutense, 35	18	Río Manzanares, 2
2	Cervantes, 1	19	San Marcos, 7
3	Mayor, 37	20	Avenida de Nuestra Señora de Belén, 28
4	Teniente Ruiz, 2	21	San Fructuoso, 12
5	Infantado, 3	22	Avenida de Lope de Figueroa, 31
6	Avenida de los Reyes Católicos, 23	23	Barberán y Collar, 10
7	Marqués de Alonso Martínez, 6	24	Cuenca, local 11
8	Ferraz, 15	25	Plaza de Carlos I, 1
9	Vía Complutense, 42	26	Entrepeñas, 4 (local 130)
10	José María de Pereda, 11	27	Paseo de la Estación, 2
11	Avenida de Ajalvir, 4	28	Espejo, 11 (Meco)
12	Tinte, 6 (cerrado)	29	Ciudad Residencial Universitaria. Campus universitario, s/n
13	Avenida de los Reyes Católicos, 42	30	Pío Baroja, 11
14	Avenida de los Reyes Católicos, 3	31	Jorge Luis Borges, 25
15	Vía Complutense, 91		Centro Penitenciario Madrid II (Alcalá-Meco)
16	Alcor, 8		Centro Penitenciario Madrid I Mujeres
17	Avenida de la Virgen del Val, 11	34	Avenida de Alfonso VI, 5