Si me lo permiten, les voy a corregir el titular del pasado día 15. En lugar de “El número de millonarios crece un 24% a pesar de la crisis”, yo creo que deberían haber puesto “El número de millonarios crece un 24% GRACIAS a la crisis”. El matiz no es baladí, y responde a algo tan viejo como que en las épocas de vacas flacas siempre suelen aflorar los miserables dispuestos a sacar provecho de las desgracias ajenas, tal como ocurrió sin ir más lejos con las fortunas amasadas en la España de los años cuarenta gracias a la práctica del estraperlo.

Soy plenamente consciente de que en este grupo de nuevos millonarios habrá sin duda personas que ganaron su dinero legítimamente, a los cuales por supuesto no tengo nada en absoluto que reprochar; pero sería ingenuo ignorar que otros puedan haberlo hecho, pongo por caso, explotando a sus empleados o beneficiándose de las dificultades económicas de las familias en apuros. Como bien dice el refrán, a río revuelto, ganancia de pescadores... o de especuladores, tanto me da.