Fumar en los restaurantes



Hace unos días estuve de viaje por una importante ciudad española, y lógicamente tuve que ir a comer a un restaurante. En la mesa de al lado había una joven pareja italiana aguardando al primer plato, y de pronto observé que sacaban un paquete de tabaco. Cuando ya estaba resignado a ver mi comida ahumada, descubrí con sorpresa que ambos se levantaban e iban a fumar a la calle.

Ante tamaña -e inesperada- muestra de educación y de respeto a los demás, no pude evitar pensar qué hubiera sucedido en caso de tratarse de españoles. Insisto, para mí el problema no es el tabaco sino la educación o, por decirlo con más precisión, la falta de ella. Es una verdadera lástima que haya que recurrir a prohibiciones legales para defender algo tan obvio como el derecho a no ser molestado por el humo de los demás siquiera cuando estás comiendo, pero por desgracia es lo que hay.


Publicada el 15-10-2010 en 20 Minutos