Las mentiras del PP



Se atribuye a Goebbels, el ministro de propaganda nazi, la cínica afirmación de que una verdad no es más que una mentira repetida un número suficiente de veces. Y desde luego, los políticos del PP de la Comunidad de Madrid parecen querer ser alumnos aventajados suyos cuando Esperanza Aguirre, Lucía Figar, Francisco Granados o Ana Botella han venido negando sistemáticamente y con todo el descaro del mundo hechos tan evidentes -y constatados y sobradamente demostrados- como que se está desmantelando la enseñanza pública, que está habiendo represalias a los profesores “díscolos” o, ya en otro orden de cosas, que el aire de Madrid está contaminado hasta resultar perjudicial para la salud.

Da igual. Para estos señores, que pretenden presentar como “negocio millonario” la venta de las humildes camisetas verdes (¿será por influencia de los famosos trajes de su correligionario Camps?) o convertir a los pacíficos profesores en un extraño y peligroso híbrido de perroflautas, agresores de peregrinos, sindicalistas siniestros y afines a “los de la ceja” (tan sólo les ha faltado recurrir al famoso contubernio rojo-judeo-masónico), todo será bueno si consiguen finalmente convertir lo blanco en negro. ¿Qué será lo próximo? ¿Negar la Teoría de la Evolución? ¿O el modelo astronómico de Copérnico? Porque a este paso...


Publicada el 11-10-2011 en EL PAÍS