Capturando, que es gerundio





Para buenas capturas, las de estos dos individuos
Ilustración tomada de theinspirationroom.com


Esta mañana me ha saltado a la cara como un escopetazo, cuando sentado en el tren y todavía adormilado, echaba un vistazo al periódico gratuito que acababan de darme en la esquina. El titular rezaba así:


CAPTURAN UNA IMAGEN DEL SUELO DE MERCURIO


He de confesar que me quedé patidifuso. Aunque eran varios los verbos que se me ocurrían para definir en correcto castellano la acción de fotografiar algo, desde luego “capturar” no entraba en el lote. Pero como no me gusta precipitarme, recurrí al oráculo del Diccionario de la Real Academia, el cual me dio estas definiciones para el verbo capturar:

1. Aprehender a alguien que es o se reputa delincuente, y no se entrega voluntariamente.

2. Aprehender, apoderarse de cualquier persona, animal o cosa que ofrezca resistencia.

Aprehender, por su parte -ya puestos es mejor llegar hasta el final-, significa en su primera acepción:

Coger, asir, prender a alguien, o bien algo, especialmente si es de contrabando.

Con lo cual, difícilmente veo como se podría coger, asir, prender o apoderarse de una fotografía que ofreciera resistencia... o aunque no se resistiera, aparte de que no me la imagino delinquiendo ni tan siquiera de manera virtual. Al menos así es como yo lo veo, ya que suelo hacerlas, tomarlas, realizarlas o efectuarlas con frecuencia, pese a lo cual hasta ahora nunca he tenido necesidad de capturar a ninguna; de hecho, ni siquiera osan protestar cuando las saco de la cámara para meterlas en el disco duro del ordenador.

Ya puestos a especular, me pregunté si no sería que la fotografía de marras, aprovechando que estaba lejos, pretendió escabullirse sin encomendarse ni a Dios ni al diablo en  lugar de cumplir con su obligación de ser remitida a la Tierra, por lo que a la sonda Messenger, que fue la que la hizo/tomó/realizó/efectuó/captó, no le habría quedado otro remedio que el de atraparla recurriendo al equivalente informático o electrónico de un lazo, una red o cualquier otro artilugio capaz de capturar o aprehender algo.

Pero no, algo me decía que las cosas no debieron ser así, y que la dócil fotografía, reproducida por cierto en multitud de medios de comunicación, se habría dejado tomar con total mansedumbre, tal como era su obligación. Así pues, ¿a qué venía el insólito verbo?

La respuesta era sencilla, y ni siquiera hacía faltar estar muy ducho en la lengua de Shakespeare para descubrila. Una rápida indagación por Internet me demostró que la redacción original en inglés -la sonda es norteamericana, por lo que la fuente original era la NASA- del titular de marras era algo así como:


NASA'S FIRST PICTURE OF MERCURY TAKEN FROM ORBIT


Traducible, en roman paladino, como “La primera fotografía de Mercurio TOMADA desde la órbita por la NASA”.

El misterio comenzaba a desvelarse. Ocurre que el verbo inglés take es una especie de comodín que, dependiendo de las circunstancias, puede significar muchas cosas diferentes en español en función del contexto de la frase en que se encuentre. La primera acepción de la traducción de take es efectivamente tomar, pero según el caso también podría significar coger, agarrar, conquistar, arrebatar, detener e incluso robar... y por supuesto, también el dichoso capturar.

El caso es que hasta el traductor automático de Google traduce correctamente take por tomar en esta frase concreta, así que la conclusión está clara: quien quiera que la tradujera para mandársela a los periódicos españoles o bien no tenía ni idea de inglés, o bien no tenía ni idea de español... o quizá ambas cosas al mismo tiempo. En cualquier caso, está claro que no quedan en demasiado buen lugar ni el culpable directo del desaguisado, ni los responsables de los periódicos -que fueron más de uno- que publicaron alegremente tamaña burrada sin molestarse en corregirla.


Publicado el 31-3-2011