Los arroyos de Meco y Torrejón



Estudiados ya en una primera serie todos los cursos de agua que riegan el término municipal de Alcalá, es la hora de considerar a los ríos y arroyos que sin pasar por nuestra ciudad corren por la comarca. Son éstos los ríos Jarama y Tajuña y numerosos arroyos, los cuales iremos viendo poco a poco a lo largo de varias semanas.

Hoy les toca el turno a los arroyos afluentes del Henares que, aguas arriba y abajo de nuestra ciudad, desembocan en nuestro río principal. Son varios arroyos de escasa importancia, pero que conviene recordar.

Comenzamos en el límite oriental de nuestro término con el arroyo que riega el término de Meco. Su nombre es el de arroyo de las Monjas, y se forma como consecuencia de la unión, a unos 700 metros de altitud, de los arroyos de Valdemoro o de la Dehesa y de los Majuelos, junto al casco urbano de la localidad de Villanueva de la Torre, en la provincia de Guadalajara. Ambos arroyos que le forman nacen al norte del término municipal de dicha localidad, en el paraje denominado Llanos de la Media Luna, a unos 780 m. de altitud, y presentan régimen de aguas temporales.

Abandona el arroyo de las Monjas el término municipal de Villanueva, así como la provincia de Guadalajara, penetrando en el término de Meco por el noreste. Adopta aquí régimen de aguas permanentes a partir de la confluencia con el barranco de Valdegallegos, y continúa en dirección suroeste hasta llegar a las proximidades del casco urbano de Meco, al cual bordea para, tras describir una amplia curva, adoptar la dirección sudeste cruzando la vía del ferrocarril a la altura de la estación de Meco, en el kilómetro 41, y poco después la carretera nacional II a la altura del kilómetro 38, desembocando por fin en el río Henares por la margen derecha y a 590 metros de altitud junto a la finca de la Canaleja.

Su curso, contando desde la más lejana de sus fuentes, el arroyo de Valdemoro o de la Dehesa, tiene una longitud de unos 13 kilómetros y recibe, además de los ya citados arroyos de la Dehesa y de los Majuelos, a los barrancos de Valdegallegos y de los Esparragales, ambos por la derecha y de aguas temporales. Por la izquierda no tiene afluentes.

Los dos arroyos de Torrejón, tal como los he denominado en el título del artículo, son los últimos cursos de agua que vierten al Henares, ambos por la margen derecha y ya a muy poca distancia del Jarama. Poseen, claro está, un nombre propio pero éste cambia a lo largo de su curso, hecho éste muy habitual en la toponimia de estos pequeños cursos de agua.

El primero que nos encontramos aguas abajo del Torote es el arroyo del Monte, que nace a 760 metros de altitud en el lugar denominado Chaparra de Algete, en el término municipal de este nombre. Adopta enseguida la dirección sur penetrando en el término municipal de Daganzo de Arriba, al cual atraviesa en toda su longitud pasando por el casco urbano. Aguas arriba de este municipio ha recogido ya sus primeros afluentes: El arroyo de Valseco y el arroyo de Algete, ambos por su margen derecha. Tras un curso de unos 16 kilómetros penetra en el término municipal de Torrejón de Ardoz y, tras recibir a 590 m. de altitud al sur de la base aérea un pequeño curso de agua que nace al norte de la citada base y se le une por la izquierda, cambia su nombre pasando a llamarse arroyo de Ardoz.

Así formado el arroyo de Ardoz se dirige hacia el sur cruzando la carretera nacional II y la vía férrea. Hasta hace unos años bordeaba por el este el casco urbano de Torrejón, cuyas viviendas acababan aquí, pero el crecimiento de la localidad lo acabó rebasando, lo que ha provocado su soterramiento en este tramo de su curso. Finalmente desagua en el Henares en las proximidades del puente de la carretera local a Loeches, tras un curso de algo más de 4 kilómetros. Su caudal es muy escaso.

El segundo afluente del Henares nace, con el nombre de arroyo de las Huelgas, al norte del término municipal de Ajalvir, en las proximidades del paraje denominado Llano de Cobeña. Desciende en dirección sur atravesando el casco urbano de Ajalvir, penetrando poco después en el término municipal de Torrejón de Ardoz. En las proximidades de las instalaciones del INTA, tras un curso de unos 7 kilómetros y medio, recibe por la derecha al arroyo de las Culebras, procedente del lugar denominado Cerro de Tordo, en el límite entre los términos de Ajalvir y Paracuellos de Jarama. Unidos ambos arroyos, el curso de agua resultante recibe el nombre de arroyo de Pelayo.

Así formado este arroyo desciende en dirección sur atravesando el casco urbano de Torrejón de Ardoz, lo que ha motivado su soterramiento en este tramo. Abandonada esta localidad, y ya cercano al Henares, vuelve a su antiguo cauce recibiendo por la derecha al recién nacido arroyo del Valle. Penetra en el término municipal de San Fernando de Henares y, tras un curso de unos 10 kilómetros, desemboca en el Henares por su margen derecha poco antes de la confluencia de éste con el Jarama.


Publicado el 14-7-1984, en el nº 909 de Puerta de Madrid
Actualizado el 7-6-2006