En la ciudad oscura





Hace ahora justo medio año celebraba en mi reseña sobre Mundo de leyendas que Ángel Torres Quesada hubiera roto su largo silencio editorial -que no de creatividad - al haber publicado en el corto espacio de unos meses Las sendas púrpuras y la citada Mundo de leyendas, algo que supone un mérito realmente notable en unos momentos en los que la crisis del mundo editorial -y no hablemos ya de la catástrofe dentro de la ciencia ficción- está causando tantos estragos.

Pues bien, contra viento y marea Ángel Torres ha sabido llevar a buen puerto, en el breve plazo de un año, nada menos que tres novelas, ya que a las dos citadas se les acaba de sumar En la ciudad oscura, finalista del premio Minotauro de 2009 y publicada por AJEC, la misma editorial responsable de la edición de Las sendas púrpuras, asimismo finalista de este premio en 2006. Aunque reconozco que no he leído la novela que le privó a Ángel del máximo galardón y de la consiguiente publicación por esta editorial en mala hora fagocitada por Planeta, y por supuesto sin pretender en absoluto juzgar su calidad -difícilmente podría hacerlo-, lo cierto es que basta con leer la reseña oficial de la misma para constatar que uno de sus méritos -independientemente de todos los demás que pueda tener- es el de ceñirse como un guante a las tendencias comerciales del momento, algo que no ocurre -quizá de aquí venga precisamente su condición de eterno finalista- con las novelas de Ángel.

Porque nuestro escritor gaditano, vuelvo a repetirlo una vez más, cuenta con un sólido estilo literario libre por completo de cualquier tipo de sometimiento a las veleidades de la moda, de modo que jamás defraudará a sus seguidores -entre los que me cuento- independientemente de sus lógicos cambios de enfoque de una a otra novela.

De hecho, sin renunciar en modo alguno a sus raíces, En la ciudad oscura supone un claro giro en la producción de Ángel, ya que sin abandonar el ámbito de la ciencia ficción en el que nuestro autor se encuentra tan cómodo, nos encontramos básicamente con una obra clara heredera del género negro clásico aunque, eso sí, ambientada en nuestro país -más concretamente en Madrid- y en un futuro inquietantemente cercano allá por la segunda década de este siglo. Quizá haya incluso quien la catalogue de cyberpunk, pero en realidad yo encuentro a En la ciudad oscura mucho más cercana a las obras de Raymond Chandler o Dashiel Hammett, que como compañera de viaje de un subgénero que a mí personalmente me resulta por lo general bastante ajeno y al que encuentro, también personalmente, unas raíces que se hunden en el extraño experimento de la Nueva cosa de los años sesenta.

En cualquier caso, insisto en ello, aunque la trama de la novela de Ángel Torres sea básicamente la de una novela negra hispánica, cuenta con los suficientes elementos como para que pueda ser considerada una obra de ciencia ficción, pudiéndosela encuadrar en el campo de las distopías... aunque en realidad lo que hace Ángel es algo tan sencillo -y tan escalofriante- como tomar todos los problemas de nuestra sociedad actual -la real, la de todos los días- y extrapolarlos a peor, aunque quizá no demasiado, llegando a unas conclusiones que literalmente te ponen un nudo en la garganta, no tanto por lo descorazonador de las mismas sino por la convicción de que realmente podría ocurrir así de ir las cosas tan mal como es posible que pudieran ir.

Claro está que, por fortuna, ésta no es la única de las alternativas posibles, aunque sí la más dramática de todas ellas, por lo que nos sirve como advertencia, a modo de mitológica Casandra, de a donde podríamos acabar llegando en el caso de que no corrijamos algunos de nuestros nefastos hábitos actuales: una sociedad desquiciada que además se encuentra, copio de la propia reseña editorial del libro, “sumida en la decadencia, azotada por la corrupción, una crisis sin fin y una epidemia para la que oficialmente no existe vacuna”.

En este marco tan poco halagüeño se mueve el protagonista Juan Saucedo, un policía corrupto -como casi todos sus compañeros- perfecto prototipo del antihéroe típico del género negro, vil en muchos de sus comportamientos pero no obstante defensor a su manera de unos valores en peligro, lo que le convertirá en el foco de una compleja trama de intrigas, corrupciones y asesinatos de cuya resolución dependerá el salvamento, quizá, de lo poco que le queda bueno a la sociedad a la que pertenece. Todo ello, huelga decirlo, narrado con el ágil estilo de nuestro autor gaditano, lo que nos permite disfrutar de la lectura al tiempo que la intriga -como no podía ser menos- se mantiene incólume hasta el final.

En la ciudad oscura es, pues, una novela que no pueden perderse los aficionados a la obra de Ángel Torres, pero que sin duda también satisfará a bastantes de aquellos a los que no atraen sus aventuras galácticas. En cualquier caso es un libro que merece la pena leer.


Publicado el 19-6-2011 en el Sitio de Ciencia Ficción