Sonda espacial europea, la primera enviada por la ESA al planeta Marte. La Mars Express, que debe su nombre a brevedad con la que fue construida, y también a que su viaje resultó ser más breve de lo normal gracias a una favorable conjunción astronómica entre la Tierra y Marte, fue lanzada el 2 de junio de 2003 desde la base espacial de Baikonur, llegando a Marte el día de navidad de ese mismo año.

La sonda, colocada en órbita polar, pronto comenzó a estudiar con detenimiento la superficie del planeta rojo, tomando fotografías de gran resolución y rindiendo resultados tan espectaculares como el descubrimiento de agua congelada en el polo sur el día 23 de enero de 2004. Aunque su vida media estaba prevista en algo menos de dos años, todavía hoy la sonda sigue operativa.

Aunque la Mars Express fue diseñada como un vehículo exclusivamente orbital, transportó con ella un módulo de aterrizaje, llamado Beagle 2 en homenaje al famoso barco en el que viajara el naturalista Charles Darwin, cuya misión era posarse en la superficie marciana con objeto de realizar durante seis meses determinadas investigaciones similares a las de sus homólogos norteamericanos. Lamentablemente se perdió el contacto con ella durante el delicado proceso del aterrizaje, dándosela por perdida el 6 de febrero de 2004.

Este fracaso parcial no empaña en modo alguno el éxito alcanzado por la Mars Express, que todavía hoy continúa operativa -su misión se ha ampliado hasta 2014- habiendo proporcionado una ingente cantidad de información no sólo sobre Marte, sino también sobre su luna Fobos, que sobrevoló a corta distancia un total de 12 ocasiones entre los meses de febrero y marzo de 2010, obteniendo fotografías de alta resolución del pequeño astro al tiempo que realizaba mediciones de alta sensibilidad sobre su campo gravitatorio. Estaba previsto que los resultados de estas medidas sirvieran para preparar el lugar de aterrizaje de la sonda rusa Fobos-Grunt, pero el fallo en el lanzamiento de la misma en enero de 2012 hizo inútil el esfuerzo.