Constelación creada por Ptolomeo, en el siglo II de nuestra era, para rendir homenaje al amante del emperador Adriano tras fallecer éste ahogado en el Nilo.

La nueva constelación se formó segregándose la parte meridional de la del Águila, de forma que representaba a este ave trasladando en sus garras al joven hasta el cielo, en una clara imitación del mito de Ganímedes.

Aunque los cartógrafos celestes de los siglos XVI y posteriores la representaron en sus mapas estelares, la nueva constelación fue considerada por muchos astrónomos más como un grupo de estrellas dentro de la del Águila que una constelación propia. La normalización de la esfera celeste realizada en 1930 la suprimió de forma definitiva.