El ferry Manuel Azaña
El Manuel Azaña en
alta mar
Si damos un repaso a la lista de barcos de la Armada española bautizados con nombres de personajes alcalaínos, nos encontraremos, tal como está recogido en otros artículos de esta sección, con san Justo y san Pastor -por separado-, san Diego, Cervantes y el cardenal Cisneros, y también hay alguno más, asimismo con un homónimo civil, como es el caso de Sarmiento de Gamboa. Sin embargo, nada sabía hasta hace muy poco de la existencia de un navío bautizado con el nombre de Manuel Azaña, por lo que su descubrimiento supuso para mí una agradable sorpresa. Eso sí, a diferencia de los anteriormente citados no se trata de un buque de guerra, algo que no es de extrañar dada la trayectoria histórica de nuestro país desde que el ilustre estadista alcalaíno ejerciera el cargo de presidente de la II República Española hasta la muerte de Franco en 1975, ya que durante los oscuros años de la dictadura su nombre y su figura estuvieron proscritos.
Mucho menos justificable es que en los treinta años de democracia posteriores tampoco se acordaran de él, y no por falta de méritos precisamente, puesto que antes de ser presidente de la República ejerció como ministro de la Guerra, tal como se llamaba entonces a lo que ahora se conoce como ministerio de Defensa; máxime si lo comparamos con la relevancia histórica, al menos desde un punto de vista militar, de los personajes cuyos nombres ostentan algunos de los buques que integran actualmente la Armada Española... pero será mejor que dejemos este tema, puesto que sería desviarnos demasiado de lo que nos ocupa.
Tal como comentaba el Manuel Azaña es un buque civil, concretamente un ferry diseñado para el transporte rápido de pasajeros y vehículos en trayectos marítimos cortos tales como los que enlazan la península con las Baleares y las ciudades del norte de África. Las fichas técnicas le definen como un ferry rápido o ferry roll-on_roll-of, lo que traducido a la lengua de Cervantes podría interpretarse como un buque de ida y vuelta, en alusión a sus servicios marítimos de corta distancia y continuos. Algo así como un autobús marítimo, para entendernos. Carece pues del glamour de los grandes trasatlánticos de lujo, pero sin duda ejerce una labor mucho más productiva socialmente que la de éstos.
Otra vista del Manuel
Azaña
Sin embargo, no se trata en modo alguno de un navío pequeño. Según su ficha técnica sus dimensiones son las siguientes: 139,7 metros de eslora (longitud de la cubierta), l8,4 metros de manga (anchura de la cubierta), 12,8 metros de puntal (altura del casco) y 3,7 metros de calado (parte sumergida del casco). Su arqueo (el volumen interno) es de 8.851 toneladas de registro bruto. Está propulsado por dos turbinas que le proporcionan una potencia de 7.200 KW cada una de ellas y una velocidad de 18 nudos (unos 33 km/hora). Su capacidad es de 600 pasajeros y 495 turismos según los datos de la naviera, aunque en la ficha técnica del astillero figuraban respectivamente 1.184 pasajeros y 450 vehículos, siendo de suponer que esta discrepancia se deba a la reforma a la que fue sometido en el año 2002. Su dotación, por último, está compuesta por 23 tripulantes.
Fue construido en 1995 en los Astilleros de Huelva y entregado a su compañía armadora, Isnasa (Isleña de Navegación SA), filial de Flebasa (Fletamientos de Baleares SA), a la que fue transferido en 1997. A finales de los años 90 esta última compañía entró al parecer en crisis, constituyéndose en julio de 1998 la nueva naviera Balearia por iniciativa de un grupo de antiguos miembros de la misma. El Manuel Azaña pasó a formar parte entonces de la flota de Balearia, a la que sigue perteneciendo en la actualidad. Según datos de la página web de la naviera (www.balearia.net), el buque fue completamente reformado en 2002 y cubre habitualmente la línea Denia-Ibiza-Palma de Mallorca. Otro dato de interés es que fue matriculado, ignoro por qué razón ya que siempre ha navegado por el Mediterráneo, en Las Palmas de Gran Canaria.
El Manuel Azaña es gemelo del Ciudad de Málaga, botado en 1998 con el nombre de Julián Besteiro y adquirido también por Isnasa, aunque tras la crisis de esta compañía fue transferido a Trasmediterránea (actualmente Acciona Trasmediterránea), que lo rebautizó con su actual nombre.
Publicado el 19-11-2007