Los Santos Niños en España
El mosaico de la cúpula del Valle de los Caídos



Como es sabido el Valle de los Caídos, situado en el paraje de Cuelgamuros, en plena sierra de Guadarrama y cercano a San Lorenzo del Escorial, fue construido a mediados del siglo XX a instancias de Francisco Franco, que lo convirtió en un monumental mausoleo de víctimas de la Guerra Civil y en su propio lugar de enterramiento, habiendo sido enterrado allí en 1975. Debido a estas connotaciones políticas, casi treinta y cinco años después de fallecido su promotor se encuentra en una especie de limbo, ignorado por los políticos y rechazado por los más extremistas, algunos de los cuales desearían verlo dinamitado sin caer en la cuenta de que, de haberse obrado siempre así, en estos momentos careceríamos de gran parte del patrimonio artístico mundial. Pero éste es otro tema, y la motivación de este artículo es histórica y artística, no política.




Vista general de la cúpula


Lamentablemente este ostracismo informativo hace que resulte muy difícil encontrar datos sobre la basílica y los elementos que la componen, hasta el punto de que hasta fechas muy recientes yo desconocía por completo la existencia de iconografía de los mártires complutenses en este monumento. Fue mi mujer la que, rastreando por internet, encontró los datos que me permitieron pergeñar el artículo a partir de los datos de una página de la asociación Acción Juvenil Española.


Vista general del grupo de los mártires (izquierda) y detalle de los Santos Niños (derecha)


Dentro de la basílica, excavada en su totalidad en la roca, uno de sus elementos más impresionantes es la cúpula que se alza sobre el crucero, la cual está cubierta por un gran mosaico realizado al estilo de los antiguos bizantinos. Sus dimensiones abruman: 40 metros de diámetro y una altura de 42, con una superficie de 2.000 metros cuadrados y más de cinco millones de teselas, lo que le convierte en la mayor obra de estas características existentes en nuestro país. El mosaico fue obra del artista Santiago Padrós Elías (Tarrasa, 1918 - El Vendrell, 1971), el cual cursó estudios tanto en España como en diversos países extranjeros antes de adquirir formación en el arte musivario nada menos que en Rávena, donde se conservan algunos de los mosaicos más famosos de la historia del arte. A su regreso de Italia se especializaría en esta técnica artística, siendo autor de numerosas obras repartidas por toda nuestra geografía1.




Santiago Padrós trabajando en una de sus obras. Fotografía tomada de la Wikipedia


Padrós, que firmaba sus obras como Sant Yago, realizó el mosaico del Valle de los Caídos entre los años 1951 y 1955. Representa, en una gran panorámica iconográfica, a un Pantócrator presidiéndolo en su centro, con cuatro grupos principales rodeándolo: los mártires españoles, encabezados por san Pablo; los confesores de la fe, asimismo españoles, -incluido san Diego- con Santiago a su frente; los asesinados en la Guerra Civil por motivos religiosos, y los soldados que combatieron en la misma. El conjunto se completa con una Cruz y una Virgen, ambas rodeadas por ángeles. Este programa iconográfico, por cierto, recuerda al de la cúpula de la basílica del Pilar de Zaragoza, obra de Francisco de Goya y donde también están presentes los Santos Niños, aunque allí se trata de frescos, y no de mosaicos.


Boceto de Padrós (izquierda) y detalle de los Santos Niños (derecha)


Como es natural, lo que a nosotros nos interesa es el grupo formado por los mártires. Gracias a un dibujo realizado por el propio autor podemos poner nombre a todos ellos, cuarenta y cinco en total incluyendo al citado san Pablo, identificable por su mayor tamaño y por su característica espada. Y es justo debajo de él donde se encuentran los dos hermanos complutenses, vestidos con largas túnicas y en actitud orante, uno de ellos parcialmente oculto por el cuerpo del otro. Realmente habrían sido difíciles de identificar, de no ser porque en el boceto de Padrós aparecen claramente escritos sus nombres. Así pues, no queda la menor duda de su presencia en este vasto santoral que, no por su relativa falta de antigüedad, deja de ser interesante.


Publicado el 15-7-2010
Actualizado el 3-9-2016