Dolores Contreras
Joven reportera gráfica española, deseosa de triunfar en su profesión. Cuando, a raíz de la destrucción de la Luna por parte de los thorbods, Miguel Ángel Aznar de Soto decidió invadir Marte para tomar la iniciativa en la contienda, llevando la lucha al territorio enemigo para obligarle a distraer tropas del frente terrestre, Dolores consiguió ser nombrada corresponsal de guerra a bordo del Rayo, obteniendo el permiso de Miguel Ángel Aznar de Soto para acompañarlo en la invasión de Nemania, la capital marciana.
Durante la mayor parte de la batalla estuvo filmando los furiosos combates que se desarrollaron entre la flota expedicionaria terrestre y los thorbods, ganándose la confianza de Miguel Ángel Aznar de Soto, el cual le confesó sus negros presentimientos sobre la presumible derrota de los humanos en la guerra contra los hombres grises. Convertida en la sombra del almirante, siguió estrechamente sus pasos tanto en Marte, primero, como a su retorno a la Tierra después, una vez que éste fuera despojado de su grado de almirante de la Policía Sideral.
Una vez llegados a nuestro planeta, continuó unida cada vez más estrechamente al ex-almirante, a quien acogió en su propia casa antes de que éste se presentara ante Estado Mayor terrestre. Cuando, ante la inevitabilidad de la derrota, el gobierno de la Federación Ibérica decidió evacuar a varios miles de personas en el Rayo, ella embarcó en el autoplaneta convertida ya en la compañera inseparable de Miguel Ángel Aznar de Soto (La abominable Bestia Gris).
Fruto de su matrimonio con Miguel Ángel Aznar de Soto fue Fidel Aznar Contreras, el cual se convirtió en el líder de la humanidad tras la llegada de los fugitivos a Redención. Bastante más joven que su esposo, tras el final de su largo periplo por el cosmos, mientras Miguel Ángel Aznar de Soto se encontraba anciano y enfermo, ella aún conservaba la salud, cuidándolo y luchando contra la tozudez del veterano luchador, que se negaba a aceptar su decadencia física, no logrando convencerlo para que delegara el mando del Rayo durante el descenso del autoplaneta en un océano de Redención.
Posteriormente, tampoco pudo impedir que éste acabara desembarcando en Redención, en una expedición prevista para evaluar el estado de la colonia, en la cual perdió la vida. A partir de ese momento no se dispone de más datos sobre su biografía, aunque cabe suponer que fallecería años después de muerte natural (La conquista de un imperio).
En la segunda edición de la Saga de los Aznar su biografía no presenta diferencias relevantes, aunque se sabe que continuaba con vida durante el proceso de fundación de la primera colonia terrestre en Redención (El reino de las tinieblas). A partir de este momento no existen ya más datos relevantes sobre su vida.
Publicado el 10-3-2000 en el Sitio de Ciencia Ficción