Joven alemana que en tiempos de la II Guerra Mundial habitaba, junto con su padre, en una granja cercana a Dresde. En vísperas del devastador bombardeo aliado que destruyó la ciudad el 13 de febrero de 1945 conoció a Fidel Aznar (Adler Ban Aldrik), llegado accidentalmente a la Tierra del siglo XX, junto con su hermano Miguel Ángel, en el transcurso de la primera expedición valerana al hiperespacio. Enamorada de él y correspondida por éste, le pidió que la llevara a su tiempo, algo a lo que Fidel Aznar no accedió ya que, al pertenecer al pasado probablemente su cuerpo se materializaría carente de alma, al estar ésta reencarnada en otra persona.

La llegada de los soldados de las S.S., apercibidos de la presencia de extraños, provocó la precipitada fuga de los hermanos Aznar, mientras Katherina y su padre eran detenidos bajo la acusación de colaborar con espías enemigos (Viajeros en el tiempo). Condenados a muerte, el padre de Katherina fue fusilado mientras a ella, al descubrirse que estaba embarazada del que sería Fidel Aznar Rudel, le fue conmutada la sentencia siendo internada en un campo de concentración.

Retornado Fidel Aznar con la intención de rescatarla, logró convencer a Edward Roerich, el coronel de las S.S. que la había hecho prisionera, para que la liberara ofreciéndole también a éste la huida de una Alemania derrotada y en ruinas, aunque ambos deberían asumir los riesgos inherentes del salto al futuro con la karendón evitando la línea normal de muertes y reencarnaciones.

El viaje se realizó con resultados dispares, puesto que mientras Roerich aparecía vivo, al llegarle el turno a Katherina no se produjo el deseado reencuentro entre su alma y su cuerpo para desesperación de Fidel Aznar, apareciendo en la cámara un inerte cadáver (Vinieron del futuro).

Sin embargo Fidel Aznar no cejó en su empeño, de modo que periódicamente probaba a materializar de nuevo a su amada con la esperanza de que su alma pudiera encontrarse alguna vez con su cuerpo. Finalmente tuvo éxito durante la estancia de Valera en Uhlán, logrando restituir a Katherina con vida. Poco después ésta daba a luz al hijo de ambos, Fidel Aznar Rudel (Al otro lado del universo). No se conocen detalles de la vida de Katherina en los años posteriores, salvo que durante una nueva desmaterialización su cuerpo volvió a aparecer muerto, en esta ocasión sin posibilidad alguna de recuperación (¡Antimateria!).