Misión espacial de la ESA, cuyo nombre corresponde al acrónimo del término inglés Soil Moisture & Ocean Salinity (Humedad del suelo y salinidad del océano en español), en la cual participa España a través de la empresa estatal EADS-CASA. Para tal fin se diseñó un satélite cuyo lanzamiento tuvo lugar el 2 de noviembre de 2009, a bordo de un cohete Rockot, desde el cosmódromo ruso de Plesetsk.

Como su nombre indica, su misión consiste en realizar un estudio global, a escala planetaria, de la influencia del agua, tanto en los continentes como en los océanos. Para ello está equipado con un sistema de 69 antenas receptoras de microondas que actuarán a modo de interferómetro, lo que le permitirá disponer de una gran sensibilidad.

Su órbita heliosincrónica está situada a unos 755 kilómetros de altitud, lo que le permite barrer toda la superficie terrestre cada tres días. Su vida útil fue calculada en tres años, aunque ya ha rebasado con creces los cuatro.