Los Santos Niños en España
Su culto en Cerezal de Aliste (Zamora)





Vista general de la iglesia de Cerezal de Aliste



Allá por el verano del año 2000, y aprovechando unas vacaciones por tierras zamoranas, tuve ocasión de visitar varios lugares en los que se rinde culto a nuestros patronos, volviendo a Alcalá con una notable cosecha de datos con la cual pude escribir y publicar un artículo en septiembre de ese mismo año. Algún tiempo después, ya en el verano de 2007, encontré en la biblioteca de Alcañices, villa zamorana en la que suelo pasar las vacaciones, un par de libros que aportaban información interesante sobre una de estas localidades, Cerezal de Aliste, razón por la que decidí segregar del artículo original la parte relativa a este pueblo, ampliándola con las nuevas aportaciones. Un año más tarde, en 2008, volví a visitar Cerezal con objeto de obtener mejores fotografías, descubriendo que la iglesia había sido restaurada recientemente construyéndosele un pequeño pórtico protegiendo el arco de entrada.

Cerezal de Aliste es un pequeño caserío situado en las cercanías del embalse de Ricobayo, junto a la carretera N-122 que une Zamora con la ciudad portuguesa de Braganza. Dada su escasa población, de apenas 300 habitantes, carece de municipio propio, estando adscrito al de la cercana localidad de Muelas del Pan. Su principal atractivo es el alcornocal que, con sus 350 hectáreas repartidas entre su término y los de las vecinas poblaciones de Ricobayo de Alba y Villaflor, es un caso único en la península a causa de lo septentrional de su ubicación, dado que el alcornoque es un árbol que normalmente crece en climas más cálidos como los de Extremadura o el Algarve portugués. El gran interés ecológico del alcornocal ha hecho que recientemente se creara un centro de interpretación en la antigua Casa del Cura, junto a la parroquia, el cual, además de contar con un pequeño e interesante museo, ha diseñado varias rutas de gran valor paisajístico por el interior del alcornocal.




La espadaña de la iglesia


En lo que respecta al pueblo, Cerezal presenta una curiosa disposición repartido en dos barrios, los cuales están separados por una hondonada por la que discurre un pequeño arroyo; como veremos más adelante, esta distribución tendría mucho que ver en el pasado con la historia de la parroquia de los Santos Niños.

Antes de describir la iglesia conviene hacer un poco de historia. Manuel Gómez Ríos, en el libro titulado Alba y Aliste en la visita de don Manuel Cid y Monroy. 17911, recoge un documento que nos informa de cual era el estado de Cerezal a finales del siglo XVIII. Por entonces la villa contaba con 44 vecinos (cabezas de familia) y 150 personas de comunión (la población total exceptuando a los niños pequeños), y el visitador afirma que los titulares de la parroquia son los santos mártires Justo y Pastor. En cuanto al estado de la parroquia, su comentario es el siguiente:


“La yglesia es bastante obscura por lo que se dio providencia para abrir una ventana en la parte inferior de ella rasgando más la que actualmente tiene en la capilla mayor; igualmente, necesita de plano y blanqueo y que se entarime la sacristía en atención a su mucha humedad. Los despojos de la hermita de Santiago se aplicaron a la fábrica de la parrochia con el fin de que sirban aquellos materiales para la obra de la panera de la yglesia, mandada executar por punto general.”


Como se ve, la iglesia de Cerezal, que hasta 1758 no fue parroquia independiente al estar unida a las de las localidades cercanas de Carbajosa y Pino, presentaba ya entonces serios problemas estructurales que se irían agravando con el tiempo. Una aportación documental mucho más precisa nos la proporciona el investigador local Fernando Carbajo Antón2, de cuyo libro he extraído los siguientes datos.




Planos para la construcción de la nueva iglesia
Tomado del libro de Fernando Carbajo Antón


La iglesia, de pequeñas dimensiones y una única nave con sacristía adosada, era un edificio muy pobre, con piso de tierra sin embaldosar donde se enterraba a los difuntos, y paredes construidas con piedra y barro. Era además oscura, fría y húmeda.




Plano general de la iglesia
Tomado del libro de Fernando Carbajo Antón


Además hacia mediados del siglo XVIII, es decir, algunas décadas antes de que tuviera lugar la visita de Cid y Monroy, se encontraba en muy malas condiciones de conservación, lo que obligó a realizar distintas reparaciones de considerable importancia. En 1754 se reemplazó el retablo primitivo por uno nuevo tallado por Felipe García y pintado por Juan Antonio Gil. Según el periodista zamorano Chany Sebastián3, diez años más tarde, en 1764, los vecinos Pedro Vara y Santiago Codesal donaron 80 y 198 reales, respectivamente, para la adquisición de las imágenes de los Santos Niños, las mismas que se conservan hoy en día. Sin embargo estas aportaciones no fueron suficientes ya que su coste total fue de 370 reales, razón por la que no fue sino hasta cinco años más tarde, en 1769, cuando las imágenes llegaron a Cerezal.




Nave de la iglesia


Las obras realizadas a lo largo del siglo XVIII no fueron suficientes para evitar la ruina de la iglesia, tal como denunciaba en 1800 el párroco. Por si fuera poco su situación en el pueblo, relativamente alejada del caserío y separada de éste por el arroyo, hacía penosa la asistencia de los fieles, sobre todo en épocas de lluvias en las que el pequeño arroyo se desbordaba dificultando el cruce del mismo. Por esta razón, se decidió edificar una nueva parroquia en otro lugar diferente más accesible, con lo cual quedarían resueltos todos los problemas que se venían arrastrando desde tiempo atrás.




Retablo


Aunque los preparativos comenzaron de inmediato, una serie de circunstancias adversas, entre ellas las guerras contra Portugal y Francia primero, y la falta de fondos después, retrasaron el inicio de las obras nada menos que hasta 1827, concluyendo éstas un año más tarde. De forma simultánea se procedió al derribo del antiguo templo, aprovechándose su solar, ampliado con los terrenos colindantes como cementerio, función que sigue desempeñando en la actualidad. En cuanto al nuevo templo, éste experimentaría diversas reformas y obras de mantenimiento en diferentes ocasiones, la última de ellas en 1991. Tal como se puede apreciar en las fotografías se trata de un edificio sin especial valor artístico, similar a muchas de las iglesias de otros pueblos zamoranos.




Imágenes de los Santos Niños


Tanto los retablos como las imágenes y los objetos litúrgicos fueron trasladados a la parroquia nueva, y con ligeras modificaciones son los que se conservan todavía hoy. En cuanto a las imágenes de los santos titulares, éstas se adquirieron en 1769, como ya quedó explicado, al precio de 370 reales, cabiendo suponer que reemplazarían a otras anteriores de las que no se tienen datos. De autor anónimo y estilo popular que recuerda a las tallas del vecino Portugal, están talladas en madera de pino policromada.Son de pequeño tamaño -70 centímetros de altura- y presentan la peculiaridad de estar ataviadas en un curioso anacronismo a la federica, es decir, siguiendo la moda de la época en la que fueron realizadas en vez de imitar con mayor o menor fidelidad, tal como suele ser lo más habitual, los atavíos romanos. Una restauración realizada en 1985 permitió recuperar la policromía original, que había permanecido oculta tras una capa de pintura negra que la recubría por completo. Quiso la casualidad que mi primera visita del año 2000 coincidiera con la víspera del 6 de agosto, encontrándome con la iglesia abierta y en plena preparación de la procesión, lo que me permitió comprobar de primera mano que en Cerezal se sigue celebrando con todo fervor la festividad de nuestros comunes patronos.




Procesión


De nuevo según Chany Sebastián4, las andas en las que se porta a las imágenes, las cuales se pueden apreciar en la fotografía, fueron adquiridas en 1882 mediante una cuestación popular que permitió recaudar los 100 reales -25 pesetas- que supuso su coste.




1 GÓMEZ RÍOS, Manuel. Alba y Aliste en la visita de don Manuel Cid y Monroy. 1791. Ed. Semuret. Zamora, 2001.
2 CARBAJO ANTÓN, Fernando. Cerezal de Aliste. Edición del autor, 1998.
3 SEBASTIÁN, Chany. Las imágenes de los patronos se compraron por 370 reales. La Opinión de Zamora, 5-8-2015.
4 SEBASTIÁN, Chany. Los devotos adquirieron las andas a finales del siglo XIX. La Opinión de Zamora, 5-8-2015.

Ver también:
Los Santos Niños en España. Su culto en la provincia de Zamora
Los Santos Niños en España. Su culto en Domez de Alba (Zamora)
Los Santos Niños en España. Su culto en Villalverde (Zamora)


Publicado el 16-9-2000, en el nº 1.682 de Puerta de Madrid
Actualizado el 25-8-2015