Cuando hace unos días escribí, con la inestimable ayuda de Pavel Borin, el artículo dedicado a las esculturas de Don Quijote existentes en Moscú¹, me encontré con la referencia de que el polifacético artista ruso Nikolai Silis se había basado en uno de sus grabados para crear sus esculturas del inmortal personaje cervantino, tanto las de gran formato como las de tamaño más reducido, sumamente cotizadas en el mercado del arte internacional.

Curiosamente todas estas esculturas, al menos las que yo conozco, están basadas en un único grabado, el titulado Don Quijote con una flor, en el que el Caballero de la Triste Figura, sentado y aparentemente descansando, contempla la flor que sostiene en la mano izquierda. Pero Silis dibujó bastantes más grabados dedicados al Quijote, catorce en total, los cuales tienen en común su estilo surrealista, que recuerda un tanto a Dalí, y las situaciones fantásticas e insólitas en las que el artista lo representa, conduciéndonos a un mundo onírico que a mí, al menos, me fascinó la primera vez que los vi.

A esta serie se suma un grabado más perteneciente a una serie distinta, dedicada a los centauros, en la que también juega Silis con todo tipo de originales y heterodoxas representaciones de estos seres mitológicos. La razón de incluirlo con los anteriores no es otra que en este dibujo están representados Don Quijote y Sancho Panza -curiosamente el escudero nunca aparece en los anteriores- no cabalgando en sus respectivas monturas, sino metamorfoseados en ellas al modo de centauros manchegos.

Todos estos grabajos, junto con muchos más de otras temáticas, pueden ser descargados de la propia página web de Silis, que lamentablemente está escrita tan sólo en ruso echándose en falta su versión en inglés, lo que dificulta enormemente su lectura a quienes no conocemos ni este idioma ni el alfabeto cirílico. He dependido, pues, del traductor de Google para poder transcribir los títulos de los grabados al español, quedándome la duda de si los resultados serán o no del todo correctos; pero por el momento, no me ha sido posible hacer nada mejor. Eso sí, los dibujos son excelentes y se pueden disfrutar plenamente sin barrera idiomática alguna dentro de la hermandad universal del arte. Todos ellos están realizados en tinta sobre papel excepto el de los centauros, que lo ha sido en rotulador sobre papel.

En el confinamiento	En el bosque de cohetes

Visión

Encuentro con líneas eléctricas	Don Quijote con una flor

Don Quijote en un caballo de madera

En el montón de chatarra	En el tablero de ajedrez

Ingravidez

Iniciación Dulcinea	Después de la batalla

Razonamiento

En la acera	Por el fuego

Don Quijote y Sancho Panza

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¹ Las esculturas de Don Quijote en Moscú