Planeta extrasolar descubierto en septiembre de 2010 por los astrónomos norteamericanos Steven Vogt y Paul Butler desde los telescopios Keck de Hawaii. Aunque no es el primero de los tipo Tierra -es decir, de constitución rocosa y tamaño más o menos similar al de nuestro planeta- que se conocen, sí es el primero de ellos con una órbita que discurre por el interior de la ecosfera de su estrella, lo que le convierte en potencialmente apto para albergar vida en unas condiciones ambientales similares a las nuestras.

Gliese 581g orbita en torno a la estrella Gliese 581, también conocida como Wolf 562 o HIP 74995. Se trata de una enana roja situada en la constelación de Libra a tan sólo 20,3 años luz de distancia, en torno a la cual se han descubierto al menos seis planetas incluyendo al propio Gliese 581g.

Gliese 581g tiene una masa estimada entre 3,1 y 4,3 veces la de la Tierra, y se encuentra a una distancia de su primaria de 0,146 unidades astronómicas, es decir, tan sólo un 15% del radio medio de la órbita terrestre. No obstante, dado que la irradiación solar de Gliese 581 es muy inferior a la del Sol, la cantidad de energía que recibe es equivalente a la de la Tierra. Se sabe también que Gliese 581g presenta rotación capturada, es decir, muestra siempre la misma cara a su sol, por lo cual su temperatura media oscila entre la cara iluminada y la oscura lo suficiente como para que en la zona del terminador se alcancen valores similares a los terrestres. Asimismo, su masa es lo suficientemente grande como para poder mantener una atmósfera.

Sin embargo, otros astrónomos como el suizo Francesco Pepe han cuestionado el descubrimiento de este planeta aludiendo que los métodos de cálculo utilizados por Vogt y Butler -ninguno de los planetas extrasolares pueden ser detectados por observación directa, sino por estimaciones indirectas de distintos parámetros de la estrella principal- podrían ser erróneos, con lo cual la existencia de Gliese 581g se mantiene por el momento en entredicho.