Mir



Estación espacial soviética y, posteriormente, rusa cuyo nombre significa Paz. Sucesora de las anteriores Salyut, era mucho más avanzada que éstas, y también de un tamaño mucho mayor. A diferencia de ellas, y en un claro precedente de la posterior Estación Espacial Internacional, estaba formada por varios módulos lanzados de forma independiente y ensamblados en órbita: el módulo principal, que albergaba los camarotes de los tripulantes y los sistemas de control (1986); los módulos científicos Kvant 1 (1987), Kvant 2 (1989) y Kristall (1990); el módulo Spektr, que sirvió de alojamiento para los astronautas norteamericanos (1995); el módulo de atraque del transbordador espacial (1995), y el módulo Priroda, equipado con un laboratorio y con suministros para las misiones conjuntas ruso-norteamericanas (1996). Asimismo contaba con esclusas de atraque para las cápsulas Soyuz -solía mantenerse una de ellas dispuesta para una posible evacuación de emergencia- y las cápsulas automáticas de carga Progress. En total, su masa llegó a alcanzar las 135 toneladas.

La Mir orbitaba a una distancia que oscilaba entre los 300 y los 400 kilómetros de la superficie terrestre, dando una vuelta completa a nuestro planeta cada dos días. Pese a que inicialmente su vida útil se calculó en tan sólo cinco años, en la práctica llegó casi a triplicarla hasta que se decidió proceder a su destrucción controlada el día 23 de marzo de 2001, precipitándola sobre una región deshabitada del océano Pacífico. Aparte de su antigüedad, otro de los motivos principales que motivaron el abandono de la veterana Mir fue la construcción de Estación Espacial Internacional. Aunque en un principio se planeó sustituirla con una nueva Mir 2, los elementos que se llegaron a construir de la misma serían utilizados finalmente para la sección rusa de la Estación Espacial Internacional.

Durante su dilatado período de vida la Mir se anotó varios notables logros, entre ellos el de ser la estación espacial más longeva hasta el presente. En ella se han batido todos los récords de permanencia en el espacio, siendo hasta ahora el cosmonauta Valeri Poliakov quien ha estado más tiempo en el espacio de forma ininterrumpida, con un total de 438 días. Asimismo, entre 1992 y 1995, y tras la firma de un acuerdo entre ambos países, la Mir fue visitada por varias tripulaciones de astronautas norteamericanos, que llegaron a ella a bordo del transbordador espacial.

Pero también tuvo que superar varios momentos difíciles, en buena parte debidos a que la grave crisis económica en la que se sumió la Rusia postsoviética durante la década de los años noventa desembocó en una falta de fondos que impidieron su correcto mantenimiento. El 23 de febrero de 1997 se produjo un importante incendio, y el 25 de junio de ese mismo año una nave de carga Progress chocó contra el módulo Spektr, provocando una fisura en el casco del mismo que a punto estuvo de obligar a la evacuación de la estación. Más chusca fue la avería del retrete y también dieron bastantes disgustos los vetustos ordenadores de manufactura soviética.


Publicado el 7-11-2008