Décimo satélite de Saturno, descubierto en 1966 por Audouin Dollfus. Su nombre corresponde al dios romano del principio y del final, o del pasado y el futuro, razón por la que se le representaba con dos rostros. Carece de equivalente griego y tampoco tiene vinculación con los ciclos mitológicos de Cronos, o Saturno.

De pequeño tamaño y forma irregular (su eje mayor apenas alcanza los 200 kilómetros), Jano es uno de los satélites interiores de Saturno, orbitando a una distancia de 151.000 kilómetros del planeta.

Su principal peculiaridad es que es coorbital con Epimeteo, intercambiando ambos periódicamente sus posiciones interna y externa respecto a Saturno. Esto hizo que durante varios años los astrónomos creyeran que se trataba de un astro único, error que no se corrigió hasta 1978, doce años después del descubrimiento de los dos pequeños satélites.