Nombre de un proyecto de transbordador espacial ruso, tomado de los gráciles y veloces barcos de vela -clíper en español- construidos a mediados del siglo XIX.

El diseño del Kliper es intermedio entre el de un transbordador clásico, como el Columbia o el Buran, y una cápsula espacial, ya que se trata de un vehículo reutilizable enviado al espacio con los lanzadores convencionales como el Ariane V o el Soyuz, siendo capaz de trasladar hasta a seis tripulantes a la Estación Espacial Internacional. Sin embargo, al carecer de bodega no sería capaz de transportar ningún tipo de instrumental o carga. Su radio de acción también sería limitado, ya que sólo se extendería hasta las órbitas bajas por las que discurre la Estación Espacial Internacional.

Puesto que su desarrollo excedía a las posibilidades de Rosaviakosmos, la agencia espacial rusa, ésta ofreció la posibilidad de cooperar en el mismo tanto a la ESA como a la japonesa JAXA. Al no obtener respuesta satisfactoria de ninguna de ellas, el programa fue cancelado finalmente en 2006.

En su lugar, las agencias citadas acordaron poner en marcha un nuevo proyecto más ambicioso, bautizado con las siglas ACTS.