La calle más larga
Visité A... movido por la curiosidad tras leer en un folleto turístico que tenía la calle soportalada más larga de Europa, algo que aunque interesante me pareció exagerado. No obstante la ciudad poseía un importante patrimonio cultural, así que en cualquier caso recorrer sus principales monumentos siempre merecería la pena.
Una vez allí comprobé que la afirmación no era exagerada; de hecho, llevo diez años caminando por ella y todavía no he conseguido llegar al final. Por fortuna la infraestructura está muy bien organizada: son abundantes los bares y restaurantes así como los alojamientos -se nota que están bien preparados-, y tampoco faltan establecimientos de otros muchos tipos que hacen agradable el paseo ni cajeros automáticos repartidos estratégicamente para que jamás te encuentres falto de dinero en efectivo.
Pero, lo reconozco, empiezo a estar cansando, por lo que me gustaría acabar ya para poder volver a casa; confío en que no sean ciertos los rumores que afirman que la calle no tiene fin y quienes la recorren están condenados a caminar por ella durante el resto de su vida... al menos, eso espero.
Publicado el 19-12-2021